Ordenan la retirada de este chocolate vendido en supermercados de Aragón, Valencia o Castilla-La Mancha

Ordenan la retirada de este chocolate vendido en supermercados de Aragón, Valencia o Castilla-La Mancha

La Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (Aesan) está supervisando el retiro del mercado de 11 lotes de chocolate a la taza de la marca Andreu. El motivo es la presencia de proteínas lácteas no incluidas en el etiquetado, lo cual supone un riesgo para las personas alérgicas a las mismas. Los lotes afectados se han distribuido inicialmente en la Comunidad Valenciana, Castilla-La Mancha y Aragón, aunque no se descarta que hayan llegado a otras regiones por redistribución.

El producto retirado es el “Chocolate familiar a la taza” de Andreu, presentado en blíster de 5 unidades de 50 gramos cada una, a temperatura ambiente y con código de barras 8428497100034. Como medida preventiva, la Aesan aconseja a los consumidores alérgicos a las proteínas de leche que se abstengan de consumir este chocolate si lo han adquirido. Para el resto de la población no supone ningún riesgo.

La alergia a las proteínas de la leche de vaca (APLV) es una reacción inmunológica adversa a las proteínas presentes en la leche de vaca y sus derivados. Afecta principalmente a niños pequeños, aunque puede persistir en la edad adulta. Los síntomas van desde erupciones cutáneas leves hasta reacciones anafilácticas. Por orden de frecuencia, lo más habitual son síntomas cutáneos, seguidos de digestivos o asociación de ambos y finalmente respiratorios y anafilaxia. El tratamiento consiste en evitar estrictamente el consumo de leche y productos lácteos.

La legislación europea exige que los 14 alérgenos principales, incluyendo la leche, estén claramente indicados en el etiquetado de los alimentos envasados. Esto permite a las personas alérgicas o intolerantes identificar y evitar los productos que les pueden causar reacciones adversas. Los errores en el etiquetado, como en este caso, suponen un riesgo para la salud de estos consumidores.

Cuando se detecta un problema de seguridad alimentaria, como la presencia de alérgenos no declarados, las autoridades competentes como la Aesan coordinan la retirada de los productos afectados del mercado. Esto implica la colaboración de fabricantes, distribuidores y puntos de venta para localizar y retirar eficazmente los lotes implicados. Paralelamente, se informa a los consumidores a través de comunicados y avisos en los medios para evitar la compra y consumo de estos productos.

Las personas con alergia a las proteínas lácteas deben extremar las precauciones al adquirir alimentos procesados: