Apolo 11: las pruebas contundentes que derriban la teoría conspirativa de la llegada del hombre a la Luna en 1969

La misión del Apolo 11, que culminó con el histórico alunizaje del hombre el 20 de julio de 1969, sigue siendo objeto de debate entre algunos sectores escépticos sobre si sucedió o no.

La llegada del hombre a la Luna representó un hito monumental en la historia de la exploración espacial, un logro que trascendió fronteras y cautivó a la humanidad entera.

Sin embargo, existen una serie de fundamentos que desmienten las teorías de conspiración y respaldan la realidad de los logros alcanzados por los astronautas a bordo de la misión Apolo 11.

La verdad sobre el aterrizaje en la Luna: las pruebas que derriban las teorías de conspiración

Casi 50 años después del icónico alunizaje del Apolo 11, persisten teorías de conspiración que desafían la veracidad de este hito histórico en la Luna.

A pesar de las abundantes pruebas y evidencias, aún hay quienes cuestionan la autenticidad de este logro humano.

Para desentrañar los argumentos más comunes utilizados por los detractores del aterrizaje lunar, la periodista científica Sarah Romero en el prestigioso portal Muy Interesante, presentó una serie de evidencias contundentes con datos científicos y observaciones verificables.

Las 5 pruebas irrefutables del alunizaje en 1969

El viaje a la Luna: la misión del Apolo 11, liderada por Neil Armstrong, Michael Collins y Buzz Aldrin, despegó el 16 de julio de 1969, marcando el inicio de una jornada histórica hacia nuestro satélite. Después de días de viaje, el módulo lunar Eagle descendió hacia la superficie lunar, culminando en el memorable primer paso de Armstrong en la Luna.

• Cinturones de Van Allen: a menudo citados por los teóricos de la conspiración, los cinturones de radiación de Van Allen plantean preocupaciones sobre la seguridad de los astronautas.  Sin embargo, la intensidad de estos cinturones durante los alunizajes del Apolo estaba en su punto más bajo, lo que minimizaba la exposición a la radiación y garantizaba la seguridad de la tripulación.

  

  Evidencia fotográfica: imágenes capturadas por la sonda japonesa SELENE y otros dispositivos confirman la autenticidad de los alunizajes. Las fotografías muestran los sitios de aterrizaje del Apolo y coinciden exactamente con las imágenes tomadas por los astronautas en la Luna.

Reflectores en la Luna: los prismas dejados por las misiones del Apolo en la Luna se utilizan con láser para medir con precisión la distancia entre la Tierra y la Luna. Estos reflectores proporcionan evidencia tangible y verificable de la presencia humana.

Rocas lunares: las rocas lunares devueltas por las misiones del Apolo han sido objeto de exhaustivas pruebas geológicas que confirman su origen lunar. Estas muestras, distribuidas a nivel internacional, constituyen una prueba tangible de los alunizajes.

Las 3 teorías de los conspiranoicos sobre la llegada del hombre a la Luna que fueron desmentidas 

• 1. Huella de los astronautas: las huellas dejadas por los astronautas en la Luna son visibles en imágenes capturadas por diversas sondas espaciales, incluido el Orbitador de Reconocimiento Lunar de la NASA. Estas imágenes confirman la presencia humana en la superficie lunar.

2. Bandera en la Luna: la aparente ondulación de la bandera estadounidense en la Luna se explica por la fuerza ejercida al colocarla en el suelo lunar, así como por la ausencia de atmósfera que permitiría el movimiento. Este fenómeno, lejos de ser un indicio de engaño, es consistente con las condiciones en la Luna.

3. Ausencia de estrellas en las fotografías: la falta de estrellas en las fotografías de la Luna se debe al contraste extremo entre la brillante superficie lunar y el oscuro cielo estrellado. Esta característica es común en fotografías del espacio y no indica falsificación.