Familiares de desaparecidos se amparan contra destrucción de cuatro memoriales

Un grupo de familiares de personas desaparecidas obtuvieron una suspensión provisional que ordena el resguardo de cuatro memoriales retirados de las inmediaciones de Palacio Nacional, ante la preocupación de los colectivos de evitar que el Gobierno Federal proceda a su destrucción, un acto que los familiares consideran una “afrenta” a sus derechos fundamentales.

Las estructuras metálicas, erigidas como memoriales en honor a Óscar Antonio López Enamorado, Antonio Verástegui y su hijo Antonio de Jesús, Alejandro Alfonso Moreno Baca y Marco Antonio Amador Martínez, desaparecidos en diferentes momentos y lugares del país, fueron retiradas del Zócalo el pasado 15 de marzo por personal militar encargado de la custodia de Palacio Nacional.

Los familiares señalaron que esta acción se enmarca en una lucha por la memoria y la justicia, encabezada por colectivos y organizaciones como la Plataforma de Víctimas de Desaparición Forzada, Glorieta de las y los Desaparecidos, Red Regional de Familias Migrantes, entre otros. Estas agrupaciones han expresado su apoyo a las familias afectadas y han instado a que los memoriales no solo sean resguardados, sino que se ordene su reinstalación en el mismo lugar donde fueron retirados.

El comunicado emitido por los colectivos denuncia el retiro de los memoriales como un acto insensible por parte de las autoridades federales, atribuyendo la responsabilidad de esta acción al presidente Andrés Manuel López Obrador. 

Además, destaca que esta medida representa una violación a los derechos humanos fundamentales, como el derecho a la memoria, a la protesta, a la manifestación, a la legalidad y a la seguridad jurídica.

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La decisión de la Juez Primero de Distrito, Minerva Mendoza, de admitir la demanda de amparo y ordenar el resguardo de los memoriales, ha sido recibida con alivio y satisfacción por parte de las familias afectadas y los grupos que las acompañan. 

Sin embargo, se espera que en la resolución definitiva se considere la importancia de estos memoriales como actos de memoria y protesta legítimos, en concordancia con los precedentes establecidos por la Suprema Corte de Justicia de la Nación.

En paralelo a este proceso judicial, las familias también han presentado una queja ante la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) por el retiro de los memoriales. 

Explicaron que esta queja busca poner de manifiesto la vulneración de los derechos humanos que representa la eliminación de estos actos de memoria y protesta, así como la necesidad de que las autoridades reconozcan y respeten el derecho a la memoria de las víctimas y sus familias.

Agregaron que los memoriales retirados cerca de Palacio Nacional son más que simples estructuras físicas; son testimonios vivos del amor y la esperanza de quienes continúan buscando a sus seres queridos, y su preservación es crucial para honrar su memoria y reclamar justicia.

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Además, reclamó al Ejecutivo actual y al que surja de las urnas el próximo 2 de junio que los memoriales instalados en el Zócalo, frente al Palacio Nacional, “permanezcan” porque, de lo contrario, estarían “desapareciendo nuevamente” a las personas no localizadas.