Cómo preparar cúrcuma para síndrome de Intestino Irritable

Los remedios naturales siempre son una excelente opción para combatir, controlar, disminuir e incluso acabar con algunas enfermedades. Por tal motivo, en caso de que padezcas del síndrome del intestino irritable (SII), la cúrcuma siempre será una de las mejores sugerencias, pues su efecto es el cuerpo es muy poderoso. Por eso debes saber cómo prepararla.

Durante años, la cúrcuma se ha reconocido por su uso en la cocina, pues ha emergido como una superespecia gracias a sus posibles beneficios para la salud, en especial en lo que se refiere al control del síndrome del intestino irritable, de acuerdo a lo asegurado por la Dra. Mariel Lizarzábal García.

Esto se debe a que la cúrcuma posee curcumina, un compuesto con muchas propiedades antiinflamatorias y antioxidantes. Si bien es cierto que tiene una baja biodisponibilidad lo cual limita su absorción, hay maneras de mejorarla, como por ejemplo combinándola con pimienta negra, rica en piperina, que potencia la biodisponibilidad de la curcumina.

Cómo preparar el té de cúrcuma

La infusión de cúrcuma es una de las formas más sencillas y placenteras de agregar esta especia a la diera diaria. Se puede usar cúrcuma fresca rallada o en trozos pequeños, o cúrcuma en polvo. Trata de agregar la cúrcuma al agua caliente y déjala en infusión. Para poder mejorar la absorción de la curcumina, debes añadir un toque de pimienta negra. También puedes experimentar con otros ingredientes como jengibre, canela o miel para maximizar el sabor.

Síndrome de Intestino Irritable. Foto: Pixabay

¿Cuáles son los beneficios de la cúrcuma para la salud?

Aparte de todas sus propiedades antiinflamatorias y antioxidantes que benefician al intestino irritable, la cúrcuma ha se ha vinculado a la salud cerebral. La curcumina podría aumentar los niveles del facto neurotrófico derivado del cerebro, algo crucial para la sobrevivencia y el crecimiento de las neuronas, lo que tendría gran relevancia en la prevención de enfermedades neurodegenerativas.

En lo que respecta a la salud del corazón, la cúrcuma puede llegar a mejorar la función endotelial, esencial para regular la presión sanguínea y la coagulación, factores claves para prevenir enfermedades cardiovasculares. En las áreas digestivas, se ha usado tradicionalmente para aliviar los síntomas del SII y varios estudios han sugerido que la curcumina puede tener efectos bastante positivos en la digestión y reducción de síntomas inflamatorios intestinales.

Es importante señalar que a pesar de los posibles beneficios, se ha recomendado moderar el consumo de infusión de cúrcuma. Ya que el exceso podría llevar a efectos adversos, en especial en las personas con condiciones de salud específicas o que están tomando ciertos medicamentos. La cúrcuma puede ser una excelente aliada en el cuidado de la salud, siempre y cuando se use con precaución y bajo el asesoramiento de un médico.

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