El look ‘de la estabilidad’ de la infanta Cristina incluye vaqueros y botines planos

No es el ‘look de la venganza’. Tampoco el de la soltería. Pero sí es un poco un estilismo liberador. La infanta Cristina, que acaba de firmar el divorcio con Iñaki Urdangarin tras muchos años separados, estuvo ayer en Barcelona para ver un partido de su hijo Pablo, jugador de la BM Granollers en la Liga Asobal. Se la vio feliz. Y, dicho sea de paso, muy estilosa.

La hermana del Rey Felipe VI acudió al partido con un look que, no por básico y conocido, es menos apetecible o ponible. Llevó unos vaqueros rectos, unos botines planos, una camisa blanca y una americana militar. También incluyó en su estilismo un chaleco de color verde que la mantenía caliente sin necesidad de ponerse el abrigo.

La Infanta Cristina en un partido de su hijo Pablo en Barcelona

Una vez finalizado el encuentro, pudimos verla con un abrigo beige y un bolso al hombro de color morado. No hay en el look de la Infanta Cristina ninguna prenda novedosa. Todas, de hecho, son parte del generalizado ‘fondo de armario’. Sin embargo, juntas funcionan a la perfección y arman un look sin grandes pretensiones pero absolutamente sobresaliente. El de Cristina de Borbón es un estilismo que podríamos llevar todas en cualquier etapa de nuestra vida y tanto en invierno como en primavera.

Si no es el look de la liberación, sí es el look de la seguridad y de la (muy deseada) estabilidad, no solo estilística, sino vital pues son muchos los años que el matrimonio entre la infanta Cristina e Iñaki Urdangarin ha pendido de un hilo. Ahora, finalmente, ambos pueden rehacer su vida.

Los mejores ‘looks’ de la Infanta Elena

La Infanta ya auguraba un ESTILAZO siendo solo una adolescente. Estas sandalias con calcetines decían MUCHO de ella.

El estampado abstracto y llamativo, si es doble, mucho mejor.

Con este *blazer* que eleva cualquier look aburrido y lo transforma en el mejor.

Porque, cuando se trata de topos, más es más (y mejor). Los pendientes y el bolso con colorido vibrante nos recuerdan su amor por los colores vivos.

Solo la Infanta Elena podía defender dos piezas tan importantes en un solo *look* (y que, juntas, sean tan elegantes).

Era el verano de 2010 y fue la invitada mejor vestida con este vestido en estampado abstracto pastel de aires *setenteros* y absolutamente atemporal.

Que el (maravilloso) abrigo de pata de gallo en color pastel no te despiste del (especialísimo) accesorio que hay en su cuello.

Vestido de encaje y torera de **Lorenzo Caprile** y, como accesorio 100% patrio, la mantilla con teja. Algo tan tradicional no puede resultar más moderno tal y como lo llevó la Infanta.

La Infanta Elena fue la sensación en la boda de Victoria de Suecia con estas dos piezas de **Lorenzo Caprile**, homenaje muy obvio al toreo (con la chaqueta torera) y menos obvio con la falda que recordaba a un capote. Puedes ser taurina o no pero este *look* era un 10.

En la pre-boda de Victoria de Suecia y Daniel Westling también epató con otro Lorenzo Caprile, esta vez en verde con corsé y chal de encaje que recordaba lejanamente al estilo goyesco.

Para la boda de Mary de Dinamarca y Mary Donaldson, en 2004, confió en Christian Lacroix para confeccionar estas dos piezas de las cuales destacaba este imponente abrigo fucsia. Un homenaje a la moda española del siglo XVIII opulenta, suntuosa y… perfecta para una reina.

Con un dos piezas rosa empolvado de **Christian Lacroix**, delicadamente ajustado a su silueta, dejaba todo el protagonismo a esa maravillosa pamela lila que daría tanto que hablar. Fue en la boda de su hermana, la Infanta Cristina.

No es habitual ver a la Infanta Elena vestida con tonos tan oscuros pero este vestido de **Valentino**, que llevó en la pre boda londinense de su prima Alexia de Grecia, merecía la pena. Además, aportaba ese colorido tan propio de ella con un chal en color coral.

Ya en la boda de su prima Alexia volvió a hacer gala del ‘más es más’ con un look en color blanco roto en el cual destacaba un pamelón forrado de plumas que era todo glamour. Nótese el bolsito de **Dior** en su mano izquierda.

Pantalón ancho y top sencillo: si hay una de las combinaciones más habituales de la Infanta en su día a día es ésta. Con pantalón estampado, por supuesto.

El abrigo camel clásico quizá no llama mucho tu atención pero sí el bolso *2.55* de **Chanel**, el pañuelo anudado al cuello y los salones con tacón y plataforma.

A este clasicismo nos referíamos, tan de la Infanta Elena, tan eterno y tan actual, a la vez.

Muy imitable esta combinación de pantalón ancho estampado con americana roja intensa -y patriótica- camisa con chorreras y bolso coordinado en blanco y rojo.

Como el bolsito *Saddle* de **Dior**, el sombrero o… el broche con forma de flor en tamaño XXL. Uno de esos accesorios extravagantes que solo ella podría defender tan bien.

Sí, el broche en un tamaño totalmente imposible es 100% Infanta Elena. Con bailarinas (de **Chanel**) y traje sastre azul eléctrico es, casi sin proponérselo, la mejor vestida de cualquier oficina.

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