Mudanza de la Industria Militar a Puebla, una obra de más de 48 mil millones de pesos

Industria Militar a Puebla | Andrés Lobato

A casi seis años y medio de haber comenzado el traslado de la Industria Militar de la Ciudad de México al municipio de Oriental, Puebla, el complejo militar ubicado en el predio de La Célula se encuentra en su octava etapa de desarrollo, con una inversión de 48 mil 523 millones 550 mil 230 pesos.

De acuerdo con información proporcionada por la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) a Multimedios Puebla, a través de una solicitud de información, al corte de 15 de noviembre de 2023 se había concluido con la edificación de siete etapas.

Asimismo, el Presupuesto de Egresos de la Federación, al cierre del 2023, se han ejercido 48 mil 523 millones 550 mil 230 pesos para llevar a cabo la mudanza de la fábrica militar a territorio poblano.

El documento también detalla que se tiene estimado que el costo total sea de 72 mil 868 millones 897 mil 87 pesos, por lo que se tiene un avance del 66.6 por ciento en cuanto al coste total del proyecto.

De esta manera, se exhibe que existe una inversión por realizar de 24 mil 345 millones 346 mil 867 pesos en los próximos años para concluir la totalidad de las obras de la Sedena en territorio poblano.

Según las proyecciones hechas por la propia dependencia federal, se tiene previsto que para el 2025 se tenga un flujo de inversión de tres mil 714 millones 240 mil 314 pesos, mientras que para el 2026, se espera que se destinen tres mil 711 millones 419 mil 245 pesos.

Con ello es que, a partir del 2027 se tiene previsto que se haga una distribución de 10 mil 861 millones 21 mil pesos, con la finalidad de completar la reubicación de la Industria Militar en Puebla.

De acuerdo con la descripción de los trabajos que se han hecho y a los que tuvo acceso esta casa editorial, la primera parte de la mudanza consistió en la construcción de una nave ensambladora militar, almacenes generales, alojamientos, polvorines, casetas de vigilancia elevadas, bardas y un camino.

La segunda parte del proyecto se enfocó en la edificación de plásticos y pinturas, una unidad habitacional militar, un área médica de consulta externa, comedores y más alojamientos, mientras que en la tercera se realizó la fábrica central de herramientas y planta de tratamientos térmicos.

Dentro de la cuarta etapa, se terminaron los trabajos de la nave ensambladora, además de la construcción de las fábricas de granadas. Cal 40mm, organización y carga de proyectiles, cartuchos, armas y morteros. Asimismo, se generó la dirección de aseguramiento de calidad y el quinto escalón de mantenimiento de armamento.

Respecto a la quinta parte del traslado de la Industria Militar, esta se basó en la construcción del quinto batallón de Servicios Especiales de la Policía Militar y su unidad habitacional, además de espacios de alojamiento femenino, comandancias de batallones y equipamiento de cuatro almacenes.

En la sexta parte se edificó el taller de fusión y carga de la fábrica de organización y carga, así como los centros de tecnología óptica y de tecnología en sistemas virtuales de adiestramiento, además de una planta potabilizadora, una área de salud ocupacional y espacios de mantenimiento de transmisiones e informática.

Para la séptima etapa, se desarrolló la red general contra incendios, un complejo deportivo, centro de convivencia familiar, subdirección de capacitación y museo, un edificio de gobierno y una fábrica de aeronáutica.

En la actualidad se encuentra en proceso la octava etapa la cual consiste en la edificación de una fábrica de serigrafía, stand de tiro, auditorio, estacionamiento con concreto hidráulico y una plataforma de maniobras vehiculares.

Al rescate de La Célula

El proyecto de La Célula fue construido durante la administración de Mario Marín Torres al frente del gobierno local, con la finalidad de ser un nodo logístico intermodal que contribuyera a agilizar los trámites aduanales, sin embargo, fracasó en cuanto a sus objetivos iniciales, por lo que se le consideró como un “elefante blanco”.

El 30 de agosto del 2017, el Congreso aprobó la enajenación del predio a petición del entonces gobernador, Antonio Gali como parte del proyecto de donación a la Sedena.

De esta manera es que el 12 de septiembre de ese mismo año, Gali Fayad y el general Salvador Cienfuegos, colocaron la primera piedra del complejo militar en dicho terreno que cuenta con una extensión de 600 hectáreas.

CHM