Desaparecer por completo: por qué ver el aterrador thriller mexicano de brujería

Es difícil definir qué es Desaparecer por completo exactamente. La película de luis Javier Henaine fue creada pensando en los grandes thrillers del cine y en las películas de suspenso, pero también tiene elementos de terror y de fantasía, de drama familiar y de muchas temáticas con las que cargamos en el mundo real.

La película mexicana sigue a un fotógrafo que se dedica a tomar fotos de asesinatos, accidentes y tragedias, que más tarde son publicadas en las páginas del periódico escandaloso y amarillista. Este no es su sueño, pero es el trabajo que tiene y debe encontrar la manera de hacerlo bien y de mantener sus imágenes en la primera página.

Santiago (interpretado por el actor Harold Torres), el fotógrafo, lo ha visto de todo, hasta que es llamado a una escena del crimen donde se topa con un escenario inquietante y con un caso que es difícil de explicar. Sin saberlo, ese caso se convierte en el principio de los problemas más grandes de su vida y de una pesadilla de la que no necesariamente podrá escapar.

Lo que sigue es una historia que juega con el escepticismo, con el miedo, con lo irracional y lo real, es una historia llena de detalles psicológicos y con situaciones que podrían ser reales, donde también se habla de un sistema roto y corrupto, pero que te sorprende con giros interesantes y con un desenlace que no se va por lo esperado.

Desaparecer por completo acaba de llegar a las salas de cine mexicanas y es una de esas películas que definitivamente no vas a querer dejar pasar. Cuando te dicen que hay que apoyar al talento mexicano, esto es a lo que se refiere, y hay varias razones que hay que considerar.

Entre el thriller y el terror

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La película de suspenso y terror sigue a un fotoperiodista de notas rojas que, después de cubrir un caso más, comienza a notar que algo está sucediendo con sus sentidos del tacto, gusto, oído, olfato y vista. Pronto, comienza a creer que podría estar enfermo o que tal vez hay algo mal con su mente, y queda desesperado por encontrar respuestas y por entender si esto tiene algo que ver con ese caso que fue a fotografiar.

La historia es inquietante y dramática, comienza como thriller y después se transforma en algo más grande, se sumerge en el terreno sobrenatural y explora un miedo con el que todos podemos sentirnos conectados, y eso es parte de lo que la hace tan interesante.

“Me interesaban las cosas muy directas que alguien se puede preguntar respecto a la ética de un fotoperiodista y de este tipo de notas rojas”, nos cuenta Torres. “En segundo lugar, me interesaba también todo el cosmos que tiene que ver con las creencias, el cuestionamiento y la posibilidad de tener seres sobrenaturales. Pero es también un thriller que está rodeado de circunstancias paranormales, pero no deja de ser un thriller”.

Una historia arraigada en la cultura mexicana

Desaparecer por completo habla de muchas cosas, como las relacione de pareja en la actualidad, la paternidad (y el miedo que esto también puede generar), el crimen y el papel de la policía, pero el lado sobrenatural de esta historia se conecta con muchas creencias y tradiciones mexicanas que siguen vivas en la actualidad.

No se puede revelar mucho sin hacer spoilers, pero es una historia con elementos de magia y con un miedo que puede parecer irracional, pero que también genera dudas e incertidumbre, y lleva a la historia a un territorio muy oscuro.

Un protagonista complejo

Harold Torres es Santiago, el protagonista de esta historia. Lo que pasa con Santiago es que no es un héroe, no es exactamente agradable y toma muchas decisiones cuestionables, pero para por una situación terrible e inesperada, y eso inevitable lleva a que nos metamos en sus zapatos e intentemos entenderlo.

“Desde un inicio me di cuenta de que era un reto importante el poder lograr que este personaje se manifestara de una manera cercana a lo verosímil, con todas estas cosas que se le presentan”, revela el actor.

“Es complicado ponerse de un lado o de otro, pero si pensamos, por ejemplo, en las personas que hacen fotoperiodismo en las guerras, incluyendo la actual, todo eso que hacen nos ayuda a enterarnos de lo que está pasando, cumplen con una función importante que es la de informar de manera real. Lo importante es ver lo que hace Santiago y luego preguntarnos por qué. Dentro de lo jodido de la naturaleza humana hay cierta belleza y eso es algo que Santiago tiene en la cabeza. Es un tipo bastante egoísta, lo que busca es salir adelante en su carrera, pero él no escogió ese trabajo, no logra lo que quería realmente y termina trabajando ahí. Eso me ayuda a entender al personaje”, agrega Torres.

Referencias a thrillers icónicos

Henaine menciona películas clásicas como Se7en y Blow Up entre las referencias para la película. De Se7en, podemos ver el tema de la investigación, de seguir las pistas y de tener a un personaje que está atrapado en un juego del que no sabe que no puede escapar, mientras que de Blow Up vienen elemento como el fotoperiodismo y un fotógrafo que se dedica a realizar un registro de las muertes más inquietantes.

Por otro lado, Torres cuenta que tomó referencias de hechos reales y de la literatura para crear al personaje y mostrar lo que estaba viviendo.

“Traigo como referencia al vocalista de INXS que perdió el gusto y eso lo llevó poco a poco a la muerte, perdió la posibilidad de disfrutar la comida y eso debió ser súper complicado. Es una de las cosas que nos hace sentir vivos. Por otro lado, yo había leído a Oliver Saxon, quien habla sobre un personaje que pierde la capacidad de percibir colores. Cuando naces sin alguno de los sentidos, te cuesta poder hacer ciertas cosas, pero cuando lo pierdes después, esto te cambia la vida completamente”, explica.

“A nivel actoral, lo que nos generó más dudas a Luis Javier y a mí era encontrar el punto exacto de cómo transmitir que se estaba perdiendo el tacto. Sería una cosa muy notoria en la vida real, pero transmitirlo en una película fue algo que tuvimos que discurrir mucho para saber por dónde llevarlo”, dice Torres. “Saxon también habla de otro personaje que pierde la percepción de la distancia, pierde la posibilidad de saber dónde están las cosas porque su cerebro no le manda las señales correctas, y me basé un poco en eso para esto”.