Guía completa de los cuarzos: tipos, significados y propiedades

Cuarzos

Los cuarzos son cristales versátiles con una amplia gama de usos y propiedades. Desde tiempos antiguos, han sido valorados por sus cualidades curativas, protectoras y energizantes. Se cree que cada tipo de cuarzo tiene características únicas que pueden influir en diferentes aspectos de la vida de las personas.

Además de sus propiedades metafísicas, los cuarzos también se utilizan en la práctica de la meditación y la sanación energética. Muchas personas llevan consigo cuarzos como amuletos o los colocan en su entorno para crear un ambiente armonioso y protegido.

Cuarzo blanco:

Este cristal ayuda a limpiar diferentes sitios, creando un ambiente más tranquilo y relajado. Además, se utiliza para reducir el estrés, la ansiedad y la tristeza profunda. Mucha gente lo usa durante la meditación y se piensa que puede potenciar la memoria.

Cuarzo rosa:

Dicen que este cristal puede ayudar a encontrar y conservar el amor. Pero no olvides que también es genial para aprender a valorarte a ti mismo. El cuarzo rosa mejora la autoestima y la confianza, eliminando las malas vibras y alejándote de los sentimientos negativos y la envidia.

Amatista:

Este cristal se usa para cuidar el chakra de la cabeza y mejorar la claridad mental. Tiene una energía que protege la mente de la negatividad y la confusión, y también puede ayudar a mantener una actitud positiva y alejar los pensamientos negativos.

Citrino:

Este cristal es genial para traer prosperidad, éxito y alegría a tu vida. También levanta el ánimo, estimula la creatividad y te hace más productivo. Además, aleja los pensamientos negativos y facilita conciliar el sueño.

Jade verde:

Esta piedra es muy popular en la cultura china por su capacidad para alejar las malas vibras. Además, nos ayuda a tener una visión realista de nosotros mismos y nos brinda sabiduría y perspectiva.

Selenita:

Representa la pureza espiritual y trae una sensación profunda de paz. Es ideal para la meditación y se cree que ayuda a expandir la conciencia y activar los centros de energía superiores, como el chakra de la corona. La selenita es excelente para calmar la mente y promover la claridad y lucidez.

Granate:

Este cristal puede fomentar el amor, la pasión, la protección, la fuerza, la confianza y la salud.

Agata:

Protege y puede alejar las malas energías de quien la lleva consigo. También puede ayudar a calmar los problemas emocionales, el estrés, la ansiedad e incluso la tristeza.

Lapislázuli:

Esta piedra es como una guardiana y curandera. Está conectada con muchos chakras del cuerpo, haciéndola muy poderosa espiritualmente. Puede ayudar a aliviar el estrés, eliminar el vértigo y traer calma, así como armonizar la mente, las emociones y el cuerpo.

Obsidiana:

Esta piedra puede limpiar tu ser, eliminando todas las energías negativas que están dentro de ti y a tu alrededor. Esto incluye pensamientos intrusivos, de derrota y violentos.

¿Cómo se activan los cuarzos?

• Ponlo sobre tierra en un recipiente durante toda la noche

• Al día siguiente, déjalo bajo la luz del sol

• Luego, déjalo en agua salada por 24 horas

• Por último, programa tu deseo en él

¿Cómo se utilizan los cuarzos?

Puedes llevar estos cristales contigo cuando salgas de casa o colocarlos en sitios clave, como la entrada de tu hogar o tu lugar de trabajo. También son útiles para limpiar la energía de tu casa o tu cuerpo.

¿Cómo se limpia un cuarzo?

Lo mejor es limpiarlos con agua natural, como la de manantiales, ríos, lluvia o arroyos. Si eso no es posible, el agua del grifo también sirve.

¿Cómo se activa un cuarzo?

Para activarlos, aunque se pueden exponer al sol, su energía es muy intensa, así que no todos los cuarzos y cristales pueden recargarse de esta manera. Los de energía más femenina, como el rosa o el blanco, podrían verse afectados por la exposición directa al sol.

Una alternativa es aprovechar las noches de luna llena para recargarlos. La luz de la luna no solo tiene un gran magnetismo, sino que también se dice que tiene el poder de la empatía, la comprensión, la claridad y el equilibrio emocional.