La historia real de 'Pared con Pared', la película romántica de Aitana en Netflix

La primera película protagonizada por Aitana se ha estrenado en Netflix el 12 de abril. La cantante se convierte en Valentina en el remake de la comedia romántica francesa ‘Tras la pared’ para librar una singular guerra de ruido con su vecino David (Fernando Guallar). La película, dirigida por Patricia Font, escrita por Marta Sánchez y producida por Tripictures, Second Gen Picturesy Blind date Productions, está protagonizada por Aitana, que salta de la música al cine, y Fernando Guallar. Además, completan el reparto Natalia Rodríguez, Adam Jezierski, Paco Tous y Miguel Ángel Muñoz, entre otros.

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La sinopsis de ‘Pared con pared’ dice así: “Valentina (Aitana) es una joven pianista que se prepara para una audición. David (Fernando Guallar), un inventor de juegos que solo puede concentrarse en silencio. Solo una delgada pared les separa… ¿lograrán aprender a convivir?”. Si la trama te suena es porque se parece y mucho a una historia de una cantante española que saltó a la televisión y estuvo presente en todos los programas de actualidad social.

‘Pared con pared’: la historia real de la película de Aitana en Netflix

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La película se presenta con una historia que recuerda mucho a lo que le sucedió a Ana Guerra con uno de sus vecinos, que llamó a televisión para quejarse del ruido que hacía la concursante de Operación Triunfo cuando ensayaba, cantante con la que Aitana interpretó ‘Lo Malo’.

Era noviembre de 2021 cuando un vecino de la artista se quejaba ante las cámaras de ‘Sálvame’ de lo difícil que es vivir en el mismo bloque de pisos que Ana Guerra. Por lo que contaba este vecino, la ex concursante de ‘Operación Triunfo’ solía tocar el piano y ensayar sus canciones a altas horas de la noche, lo que le molestaba un molestar tremendo para descansar. La artista dio la cara por esas acusaciones y bajó de su casa para hablar con Sergi, el reportero de ‘Sálvame’. Ana no comprendía porque este tema daba tanto de sí, ya que le pidió perdón al vecino en su momento y no ha vuelto a producirse otra molestia por sus ensayos. “Cumplo mis decibelios y mis horarios, tengo que trabajar”, explicaba la artista.

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“Se ha venido como muy arriba todo”, se quejaba la cantante, que asegura que ella arregla las cosas de su vida en privado. Ana Guerra explicaba ante las cámaras que, incluso, tomó otras medidas para garantizar el descanso de sus vecino. La canaria colocó una doble alfombra bajo el piano, también puso doble ventana y bajaba las persianas: “Pero insonorizar la casa cuesta una pasta y estoy de alquiler”, explicaba la cantante.