Nuevos avances permiten la desaparición total en la mitad de los casos de psoriasis

Hay un tratamientos que logran remitir por completo los brotes.

La psoriasis no es un problemilla estético de descamación de la piel, como pudiera parecer desde fuera. Es una enfermedad crónica y dolorosa que puede afectar y mucho la calidad de vida y la salud mental.

No se conoce su origen. Parece tener un componente genético pues un 30% de pacientes tiene antecedentes familiares. Sufren una alteración en el sistema inmune que conduce a la psoriasis.

No hay aún ninguna cura. Sin embargo, ha llegado una batería de tratamientos cada vez más eficaces que están consiguiendo unos resultados muy positivos. Unas excelentes noticias para el más de un millón de afectados que tiene esta enfermedad en España.

Qué tratamientos tiene ahora la psoriasis

En líneas generales podemos considerar tres líneas de tratamiento. Dos más clásicas y una más innovadora.

• Medicamentos tópicos (cremas o geles) que se aplican sobre las placas de psoriasis. Es el tratamiento habitual cuando las lesiones son poco extensas. “Es menos eficaz, pero no tienen efectos secundarios y con las formas leves de psoriasis puede ser suficiente”, puntualiza el doctor José Manuel Carrascosa, coordinador de psoriasis en la Academia Española de Dermatología y Venereología.
• La fototerapia es el uso de rayos ultravioletas. Un método más dirigido a casos graves que no remiten o con placas muy extensas, que superan el 10% de la piel.
• Los fármacos biológicos. Son un tipo de medicamento que aparecieron hace un par de décadas. Se asemejan a proteínas humanas lo que les permite actuar sobre las células, bloqueando o estimulando el sistema inmune.

Antes el tratamiento se centraba en antiinflamatorios. Ahora la investigación está dirigida a este tipo de medicamentos biológicos que “proporcionan mejores resultados clínicos. Son más potentes, persistentes y seguros”, ha dicho el dermatólogo.

Unos resultados cada vez mejores

La clave de estos tratamientos biológicos es que tienen unas dianas más concretas. Van dirigidos a las moléculas más específicas del proceso inflamatorio de la psoriasis.

“Podemos conseguir, incluso en pacientes con enfermedades graves, que hasta el 90% consigan resultados muy buenos y, en más de la mitad de los pacientes, conseguir lo que llamamos ‘remisión completa’, es decir, que el paciente no tenga manifestaciones”, ha explicado el doctor Carrascosa.

No quiere decir que el paciente se ha curado, puesto que ya hemos mencionado que no hay cura conocida. Pero en la práctica, se va a poder olvidar del problema.

Es un gran paso, puesto que si bien hay pacientes con episodios ocasionales, a otros muchos los brotes de psoriasis son persistentes durante años e incluso décadas. “La mayoría de los pacientes tienen formas crónicas y persistentes de la enfermedad”, ha señalado el experto.

Cuál es el siguiente objetivo

Por no pecar de excesivo optimismo, se ha de reconocer que al tratamiento de la psoriasis le queda camino por recorrer hasta la completa curación. Para empezar el precio. Los medicamentos biológicos son muy caros. No se recetan sino en casos contados.

De hecho, antes de dar medicamentos biológicos se prescriben otros que también apuntan al sistema inmunológico. Son los llamados tratamientos sistémicos no biológicos. “No son tan específicos y son menos eficaces que los biológicos y con más efectos adversos”, nos apunta el doctor Carrasco.

La buena noticia es la aparición de los medicamentos biosimilares. Se basan en medicamentos biológicos que ya han perdido la patente. Son como los genéricos de los medicamentos biológicos. “No son los más eficaces o más novedosos, pero son buenos y más asequibles”, añade el dermatólogo.

El factor económico hace que se utilicen primero medicamentos menos eficaces a los biológicos

Otro avance que parece ya muy próximo es la mejora en la administración de estos medicamentos. “Están en desarrollo algunas moléculas que en lugar de ser pinchadas son por vía oral”, añade.

La importancia de la acción precoz

La universalización de estos tratamientos biológicos tendría más repercusiones positivas para los afectados. La psoriasis puede conducir a otras complicaciones. Un 30% de pacientes, por ejemplo, sufren inflamación de las articulaciones, artritis.

Estas inflamaciones dolorosas y limitantes pueden darse en manos, pies, rodillas y codos. Y también, menos conocido, en la columna vertebral.

Pues bien “Hay estudios que indican que los pacientes con psoriasis que reciben un tratamiento biológico y precoz tienen menos probabilidad de desarrollar este tipo de trastornos”, añade el doctor Carrascosa.

Además, un diagnóstico precoz ayudará a minimizar el daño articular. Por eso los pacientes de psoriasis con dolor articular deben solicitar una ecografía o test de detección para ver si es debido a la psoriasis, lo que se conoce como artropatía psoriásica.