Tyler O’Neill de los Red Sox termina ensangrentado después de chocar con Rafael Devers

Tyler O’Neill y Rafael Devers colapsaron durante el séptimo inning del encuentro que conmemora el Día de Jackie Robinson

En un momento tenso durante la séptima entrada del Día de los Patriotas, los aficionados presentes en el Fenway Park presenciaron un incidente inusual en el jardín izquierdo. Tyler O’Neill, Rafael Devers y Ceddanne Rafaela de los Boston Red Sox se encontraron en un elevado en el séptimo inning del encuentro contra los Cleveland Guardians, pero la coordinación entre los jugadores no estuvo a la altura de la situación.

O’Neill, atacando desde el jardín izquierdo, parecía tener el control de la jugada. Sin embargo, Devers retrocedió desde la tercera base hacia el mismo lugar, sin percatarse de la presencia de su compañero. El resultado fue un choque entre ambos jugadores, lo que provocó la intervención inmediata del manager Alex Cora y del equipo de entrenadores.

Aunque Devers y Rafaela salieron ilesos, O’Neill no tuvo la misma suerte. El jugador quedó ensangrentado en la frente como resultado del impacto y tuvo que abandonar el juego. Actualmente, se encuentra bajo el protocolo de conmoción cerebral de la liga, después de recibir ocho puntos de sutura.

El incidente, que dejó a los Red Sox sin una pieza clave en el juego, resalta la importancia de la comunicación y la coordinación en el campo de juego. A pesar del contratiempo, el equipo continuó su esfuerzo en el partido, demostrando su capacidad para enfrentar desafíos inesperados.

Cleveland se queda con la pizarra

El ambiente prometía ser diferente y lleno de diversión para los aficionados que acudieron a Fenway Park para presenciar el juego matutino de los Red Sox.

Sin embargo, la realidad resultó ser una experiencia dolorosamente familiar y, definitivamente, nada divertida cuando la novena de Boston fue superada 6-0 por los Guardians.

La acción en las bases de Fenway fue escasa. Los bates de Boston sólo pudieron conectar tres hits: uno cortesía de Jarren Durán, otro de Rafael Devers y otro de Tyler O’Neill, además de dos bases por bolas, y se poncharon en ocho ocasiones.

La derrota, que deja a los Red Sox con un récord de 9-8, se vio empañada por una oportunidad desperdiciada. Kutter Crawford estuvo impresionante, limitando a los Guardians a dos hits, sin otorgar bases por bolas y ponchando a seis en cinco entradas y dos tercios.

De acuerdo con estadísticas del equipo, Crawford es el único lanzador en la historia de la franquicia (excluyendo los primeros juegos) que no ha permitido más de una carrera limpia y tres o menos hits en cada una de sus primeras cuatro aperturas de una temporada.

Además, en una muestra de la magia impredecible del beisbol, la actuación de Crawford en el Día de Jackie Robinson redujo su efectividad a 0.42.

Los Guardians se fueron al frente en la apertura del séptimo rollo con un bambinazo de dos carreras de Will Brennan.

En el octavo episodio, Ramírez amplió la ventaja con doblete remolcador de dos carreras. En el noveno inning Gabiel Arias sumó dos más para los Guardians.

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