La coartada de Bryan Kohberger pone en duda su ubicación la noche de los asesinatos de estudiantes en Idaho

Bryan Kohberger, el estudiante de posgrado acusado de asesinar a cuatro estudiantes de la Universidad de Idaho en noviembre de 2022, estaba conduciendo de madrugada en el momento de los asesinatos, según una presentación legal de su defensa ofrecida a última hora del miércoles.

“El señor Kohberger salió a conducir en las primeras horas de la mañana del 13 de noviembre de 2022; como hacía a menudo para hacer senderismo y correr y/o ver la luna y las estrellas”, reza el documento.

“Condujo por toda la zona al sur de Pullman (Washington) y al oeste de Moscú (Idaho), incluido el parque de Wawawai”, prosigue el escrito.

La defensa planea llamar a un experto en datos de torres de telefonía móvil para que ayude a corroborar las afirmaciones sobre la ubicación de la joven de 29 años en el momento de los asesinatos, según el expediente.

La defensa también sugirió en su recurso que podría llegar “información adicional” sobre el paradero de Kohberger, así como “pruebas exculpatorias críticas”.

Kohberger está acusado de matar a cuatro estudiantes de la Universidad de Idaho que vivían en una casa fuera del campus: Madison Mogen, Kaylee Goncalves, Xana Kernodle y Ethan Chapin.

Madison Mogen, de 21 años, arriba a la izquierda, Kaylee Goncalves, de 21 años, abajo a la izquierda, Ethan Chapin, de 20 años, segundo a la derecha, y Xana Kernodle, de 20 años, fueron asesinados en una casa de estudiantes en Moscú (Idaho) (Instagram)

El presunto asesino cuádruple Bryan Kohberger está acusado de allanar la casa de estudiantes en la madrugada del 13 noviembre y apuñalar a los cuatro jóvenes en un salvaje ataque con cuchillo.

Había otras dos compañeras de casa presentes en la residencia en el momento del ataque de la madrugada, pero resultaron ilesas.

Uno de los supervivientes, Dylan Mortensen, se encontró cara a cara con el asesino enmascarado, quien vestía de negro y tenía las cejas pobladas, según la declaración jurada criminal.

En mayo de 2023, Kohberger se negó a declararse culpable en el caso, lo que llevó a un juez a marcar su postura como no culpable.

En un informe de agosto también se afirmaba que Kohberger había salido a dar una vuelta en coche en el momento de los asesinatos.

Ese documento, sin embargo, contenía menos detalles, señalando que el estudiante “no afirmaba estar en un lugar concreto a una hora concreta.”

Decía en parte: “El Sr. Kohberger tiene desde hace tiempo la costumbre de dar paseos en coche solo. A menudo salía a dar paseos en coche por la noche.

“Lo hizo a última hora del 12 de noviembre y hasta el 13 de noviembre de 2022. “El Sr. Kohberger no afirma estar en un lugar específico en un momento específico; en este momento no hay un testigo específico que diga con precisión dónde estaba Kohberger en cada momento de las horas entre la noche del 12 de noviembre de 2022 y la madrugada del 13 de noviembre de 2022.

Estuvo fuera, conduciendo durante la noche y la madrugada del 12 al 13 de noviembre de 2022″.

Los fiscales argumentaron que esta alegación era demasiado vaga.

La presentación del miércoles se produjo justo antes de que venciera el plazo para presentar información adicional relacionada con su defensa de la coartada.

La actualización de las alegaciones de defensa de la coartada es la última novedad en este juicio de gran repercusión mediática.

A principios de este mes, la defensa de Kohberger solicitó que las solicitudes de presentación de pruebas se sellaran porque “los documentos contienen hechos o declaraciones que podrían amenazar o poner en peligro la vida o la seguridad de las personas”.

Idaho tiene la intención de solicitar la pena de muerte contra Kohberger.

Demolición de la casa donde murieron los cuatro estudiantes (AP)

Su defensa solicitó a principios de este año que el juicio se trasladara fuera del condado de Latah, alegando que la “amplia e incendiaria publicidad previa al juicio” lo haría injusto.

En marzo, el Tribunal Supremo de Idaho denegó una petición de Kohberger para que se anulara su acusación ante el gran jurado.

Aún no se ha fijado la fecha del juicio, ya que Kohberger renunció a su derecho a un juicio rápido.

Los fiscales lo han vinculado a los asesinatos, en parte, a través de imágenes de vigilancia que muestran su Hyundai Elantra blanco viajando hacia y desde la escena del crimen.

En una declaración jurada, publicada en enero del año pasado, se esbozaban algunas de las pruebas contra el asesino acusado, incluido su ADN en una funda de cuchillo abandonada en el lugar de los asesinatos, las imágenes de vigilancia y la actividad de los teléfonos móviles.

La funda de un cuchillo de tipo militar o Ka-Bar se encontró en parte bajo el cuerpo de Mogen después de que ésta y Goncalves fueran encontrados apuñalados varias veces en la cama de Mogen, en el tercer piso de la vivienda.

Se descubrió entonces que el ADN del cierre del botón de la funda coincidía con el del acusado de asesinato, de 28 años.

Los abogados de Kohberger han intentado poner en duda la solidez de estas pruebas de ADN, en particular el uso de la genealogía genética.

Según la declaración jurada del caso, el FBI utilizó bases de datos de genealogía genética para tratar de identificar la fuente de ADN.

A continuación se recogió basura de la casa de los padres del sospechoso en las montañas Poconos y se encontró una coincidencia familiar -del padre de Kohberger- con la funda, según la declaración jurada criminal.

Tras la detención de Kohberger el 30 de diciembre, se tomaron muestras de ADN directamente del sospechoso, que arrojaron “una coincidencia estadística”, según los fiscales.