Por qué ‘She-Hulk: Abogada Hulka’ se puede dar por cancelada

Marvel Studios puso mucho interés en ampliar el universo cinemático a la televisión, sobre todo por la apuesta de Disney por el streaming y como aliciente para captar suscriptores. Era una buena forma de sacar provecho de personajes como Hulka, cuyos cómics no tuvieron nunca la popularidad deseada. Y, a pesar de haber servido para producir una de las series de Marvel más originales, los fans deberían dar She-Hulk: Abogada Hulka por cancelada.

No son elucubraciones de un servidor sino de Tatiana Maslany, la actriz que dio vida a Jennifer Walters, la prima de Hulk que posee los mismos poderes superlativos que Bruce Banner pero sin perder el intelecto al transformarse en un monstruo verde. Como informó durante una entrevista, que nadie espere una segunda temporada porque se pasaron de presupuesto y, al plantearse la posibilidad de producir más episodios, “Disney se puso en plan ‘no, gracias’”.

El presupuesto se disparó y, cuando se planteó la posibilidad de rodar una segunda temporada, Disney dijo: “No, gracias”

She-Hulk: Abogada Hulka era un proyecto arriesgado. Requirió una inversión aproximada de 225 millones de dólares para producir nueve episodios de media hora de duración. Esto supone un precio por episodio de 25 millones para una serie que, en realidad, era una comedia de abogados con una protagonista hecha con CGI y escenas de acción repletas de efectos visuales para amenizar los chistes.

Esta era la gracia: aprovechar el Universo Cinemático de Marvel para explotar su vis cómica más absurda. El trabajo de Jennifer Walters lo permitía como abogada de casos relacionados con los superhéroes y supervillanos y, además, tenía buen material a nivel de cómic. Creada por Stan Lee y John Buscema en 1980, había sido reivindicada por John Byrne en 1989 y Dan Slott ofreció una de las etapas más divertidas a partir de 2004, poniendo énfasis en la naturaleza disparatada como abogada.

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La visión de Jessica Gao, de hecho, bebía del espíritu de la etapa de Slott. Y, con cameos como el de Mark Ruffalo como Hulk, Charlie Cox como Daredevil o Tim Roth como Abomination, ofreció una temporada desenfadada, irregular pero con un ingenioso episodio final que derrumbó cualquier expectativa del espectador y dio una vuelta de tuerca al concepto de romper la cuarta pared.

їCГіmo habrГ­a continuado Gao de poder escribir mГЎs episodios? SegГєn Maslany, seguramente nunca lo sabremos.

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