En Plaza Madero la fiesta continúa y no piden el INE

El fin de clases y el periodo de vacaciones son el pretexto para acudir a lugares como el bar Bad Bunny, donde los jóvenes pasan el rato con amigos. Foto: Jorge Medellín EL UNIVERSAL

La fiesta sigue en la Plaza Madero 20, en el Centro Histórico, a una semana de la suspensión de actividades de uno de los locales donde se rebasó el cupo.

Pese a que el Black Diamond fue cerrado el 7 de junio por permitir el ingreso a más de 4 mil clientes, cuando el límite era de mil, además de que se detectó al venta de alcohol a menores de edad, otro de los locales llamado Bar Bunny siguió dando servicio y ofrece bebidas, comida y alcohol sin pedir el INE o algún método de verificación de mayoría de edad a sus consumidores.

Aproximadamente a las 14:00 horas del viernes, el Bar Bunny estaba en operación. Según testimonios de los asistentes, la temporada de término de estudios y las vacaciones de verano son la excusa perfecta para ir a los locales del centro y pasar un buen rato, a veces hasta altas horas de la noche.

“La verdad es que aquí hay buenos precios y está bueno el ambiente. Muchos salimos de la escuela y nos venimos a pasar un buen rato”, afirmó Andrea González, una de las asistentes al bar Bad Bunny.

Conforme fue corriendo la noche, la pista de baile y las mesas comenzaron a llenarse de gente y bebidas, mientras la música sonaba en el local.

También, otros locales de la zona Centro siguieron ofreciendo servicio y dando ingreso a la gente mientras en sol se ocultaba en el centro de la Ciudad de México.

En tanto, el Black Diamond, que se encuentra en el último piso de esta plaza, está completamente cerrado y con sellos de suspensión de actividades por parte del Instituto de Verificación Administrativa del Gobierno de la Ciudad de México.

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