El Gobierno federal se prepara para un largo y costoso camino de recuperación tras el derrumbe del puente de Baltimore

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Washington (CNN) — La reconstrucción del puente Francis Scott Key y la recuperación del puerto de Baltimore requerirán un enorme esfuerzo interinstitucional y una importante financiación federal.

El presidente Joe Biden prometió el pleno apoyo del gobierno federal en los esfuerzos de respuesta y recuperación tras el derrumbe del martes. Su gobierno ya ha transmitido la urgencia de abrir la financiación federal para retirar los escombros y, en última instancia, reconstruir el puente.

“Le ordené a mi equipo que mueva cielo y tierra para reabrir el puerto y reconstruir el puente tan pronto como sea humanamente posible”, dijo Biden sobre la respuesta interagencial, prometiendo que el gobierno federal “pagará el costo total de la reconstrucción de ese puente”.

El puerto permanece cerrado indefinidamente y los viajeros no pueden acceder a una arteria clave del tráfico.

Aunque el precio de la reconstrucción sigue sin estar claro, existen varios mecanismos a los que puede recurrir el gobierno federal para sufragar lo que probablemente será un proceso de reconstrucción largo y costoso, que en última instancia puede requerir la intervención del Congreso.

El secretario de Transporte, Pete Buttigieg, dijo que no hay estimaciones inmediatas de cuánto costaría reparar el puente.

“Estamos comprometidos a entregar todos los recursos federales necesarios, cada recurso federal necesario para ayudar a Maryland a volver a la normalidad, y vamos a trabajar con ellos en cada paso del camino para reconstruir este puente. No va a ser sencillo”, declaró a los periodistas en la Casa Blanca. “La reconstrucción no será rápida ni fácil ni barata, pero lo conseguiremos”.

La fuente más probable de financiación inmediata para las reparaciones del puente es el Fondo de Emergencia de la Administración Federal de Carreteras, según una fuente del Congreso. CNN contactó con el Departamento de Transporte de EE.UU. para comprobar el saldo de ese fondo, que suele recibir US$ 100 millones al año.

Con las operaciones de emergencia en marcha, los funcionarios federales y estatales trabajarán sin descanso para evaluar los daños y el costo de la reconstrucción, y reconstruir rápidamente, dijo Andy Winkler, un experto en desastres y cuestiones de infraestructura en el Centro de Política Bipartidista.

La construcción del puente Francis Scott Key comenzó en 1972 y costó US$ 60,3 millones, según la Autoridad de Transporte de Maryland. El puente se abrió al tráfico en marzo de 1977. Pero Winkler dijo que no necesariamente será más rápido construir un puente de esta magnitud 46 años después y ese proceso se complica por la ubicación del puente sobre un puerto fluvial en funcionamiento.

Mientras un equipo de organismos gubernamentales evalúa los daños, se está intentando determinar cuánto costará sustituir el puente y cuánto tiempo llevará hacerlo, y si las piezas restantes del puente se pueden salvar o hay que reconstruirlas.

Existen algunos precedentes de una respuesta federal de esta magnitud: el derrumbe del puente sobre el río Mississippi en la I-35W en Minnesota en 2007 y la sección del paso elevado de la I-95 que se derrumbó en Filadelfia el pasado mes de junio.

Tras el derrumbe de la 1-95, la Administración Federal de Carreteras concedió millones de financiación inmediata para poner en marcha las labores de recuperación y reconstrucción, algo que podría repetirse en esta situación, según Winkler.

También hay fondos de la ley bipartidista de infraestructuras que podrían utilizarse para reconstruir el puente.

Esa ley autorizó US$ 550.000 millones en nuevas inversiones federales. Como ocurre con cualquier paquete de gasto masivo con cientos de fuentes de financiación, es difícil saber exactamente cuánto dinero queda. Pero el dinero se está desembolsando a lo largo de un periodo de cinco años, por lo que habrá fondos disponibles hasta 2026.

La mayor parte del dinero pasa por el Departamento de Transporte de EE.UU. y se concede anualmente a los estados y proyectos mediante una fórmula basada en el estado o en programas de subvenciones competitivas destinadas a proyectos específicos. Se espera que Maryland reciba este año más de US$ 940 millones para carreteras, puentes y seguridad vial. El Estado también puede solicitar subvenciones adicionales para proyectos específicos.

Tras el derrumbe de un puente de cuatro carriles y 136 metros de largo en Pittsburgh en 2022, horas antes de que Biden visitara la ciudad, el dinero de la ley de infraestructuras ayudó a reconstruir el puente rápidamente sin afectar a la financiación de otros proyectos críticos en la región. El puente se reabrió en el plazo de un año.

La secretaria del Tesoro, Janet Yellen, dijo que los fondos de la ley, así como los pagos anticipados del seguro, ayudarán a la reconstrucción.

“Tenemos dinero de la ley bipartidista de infraestructuras que podría ser útil. Mi expectativa sería que, en última instancia, habrá pagos de seguros en parte para cubrir esto. Pero no queremos que la preocupación por la financiación frene la reconstrucción”, declaró en un programa de la MSNBC.

El gobierno también podría reunir recursos de financiación del paquete de ayuda por covid aprobado en 2021. Y es posible que el Congreso tenga que aprobar financiación adicional.

Sigue sin estar claro si la naviera, la empresa de fletamento de buques u otra entidad externa podría ser considerada responsable financiera, aunque sea en parte, del derrumbe del puente. La Guardia Costera de EE.UU. y la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte han empezado a investigar los problemas eléctricos del barco.

Aunque Buttigieg declinó hacer comentarios sobre la investigación independiente, dijo que “si alguna parte privada es responsable y tiene que rendir cuentas por esto, entonces tendrá que rendir cuentas”.

Mientras tanto, dijo, su departamento está trabajando para “derribar todos los obstáculos, físicos, financieros, administrativos, lo que significa utilizar todas las herramientas que tenemos como departamento, y muy probablemente trabajar también con el Congreso”.

A pesar de la importante paralización del Congreso en numerosas cuestiones de gasto, Winkler predijo que podría haber apetito para ayudar a financiar los esfuerzos para reconstruir el puente.

“Se reconoce que esto puede ocurrir en cualquier parte, y los miembros del Congreso pueden llegar a un acuerdo si se necesitan recursos”, afirmó.

Sin embargo, podría llevar más tiempo aprobar una ley de gastos suplementarios, que suele abarcar varias catástrofes, como tornados u otras inclemencias meteorológicas.

Winkler dijo que también será clave vigilar si el presidente declara una emergencia federal y en qué plazo, lo que puede ayudar a relajar ciertas normativas federales y normas de contratación para acelerar el proceso de reconstrucción.

El gobernador de Maryland, Wes Moore, ya declaró la emergencia en su estado, y tendría que solicitar una declaración de emergencia a la Casa Blanca.

El senador demócrata Chris Van Hollen, que representa a Maryland, dijo que la delegación del Congreso de Maryland está trabajando con el estado para determinar qué financiación federal es necesaria.

“Una vez que se tomen esas decisiones, me centraré en proporcionar los recursos federales necesarios lo antes posible”, dijo en un comunicado.

Antes de la colisión del martes, una fuente del Congreso dijo a CNN que no se había solicitado financiación de la ley bipartidista de infraestructuras para el Key Bridge, que estaba en condiciones adecuadas y calificado como regular por el Departamento de Transporte de Estados Unidos, según datos federales.