Tortas escaldadas murcianas, dulce tradicional de la abuela con anís y naranja
galletas estrellas
¡Las recetas tradicionales son infinitas! Hoy te enseñamos cómo preparar unas exquisitas tortas escaldadas, un claro ejemplo de cómo hay elaboraciones sencillas que pueden perdurar en el tiempo. Originarias de la Región de Murcia, solían reservarse para la Navidad, pero en la actualidad, podemos disfrutarlas durante todo el año.
Aunque no conocemos la fecha exacta de su creación, sí que sabemos que en tiempos pasados, cuando no todos tenían el privilegio de tener horno en casa, la masa se llevaba a la panadería para ser horneada. Curioso, ¿verdad?
En el video del canal de YouTube “Cocina en Familia” te explican cómo prepararlas, paso a paso. Y si lo prefieres por escrito, te dejamos todos los detalles a continuación.
Si sigues las instrucciones al pie de la letra, te garantizamos un resultado espectacular. ¡Anímate a probar esta receta tradicional murciana recuperada para los tiempos modernos!
Tortas escaldadasPara 4 personasIngredientes
- 700 g de harina de trigo de múltiples usos
- 250 g de azúcar
- 250 ml de aceite de oliva suave
- 70 ml de naranja exprimida
- 70 ml de anís seco
- Corteza de naranja
- 8 g de levadura química o polvos de hornear
- Azúcar para espolvorear
Paso a paso
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Prepara la masa
En un bol metálico, mezcla 700 gramos de harina con 8 gramos de levadura. En un cazo, calienta 250 mililitros de aceite con cáscara de naranja hasta que esté bien caliente para aromatizar. Retira la cáscara de naranja y vierte el aceite caliente sobre la harina. Agrega 250 gramos de azúcar, 70 mililitros de zumo de naranja y 70 mililitros de anís. Amasa con las manos hasta obtener una masa homogénea.
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Forma las tortas y hornea
Precalienta el horno a 200 grados. Divide la masa en porciones y estírala con un rodillo, evitando que quede demasiado fina. Corta las formas de las tortas con moldes y colócalas en una bandeja de horno con papel. Hornea durante 20-25 minutos hasta que estén doradas.
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Baña en azúcar
Una vez horneadas, aún calientes, sumerge las tortas en azúcar para que se adhiera bien. Luego, deja enfriar las tortas y luego guárdalas en bolsas de plástico o una caja metálica para que mantengan su frescura y no se endurezcan demasiado.