Fernando Alonso tira con bala de ironía y se declara 'pasota' para la carrera esprint

Alonso mantuvo su palabra cuando en China quitaba importancia a la carrera sprint (REUTERS/Brian Snyder)

Fue una sesión clasificatoria en la que nadie terminó contento, incluyendo a Max Verstappen, quien incluso se extrañaba por salir primero en la carrera esprint del Gran Premio de Miami tras un llamativo error de pilotaje. Los hubo peores, con la excepción de Charles Leclerc y Daniel Ricciardo (segundo y cuarto, respectivamente).

En China, la lluvia revolvió el orden competitivo natural de la parrilla esprint. En Miami también, aunque por distintas razones. Una pista que se limpiaba progresivamente, unos pilotos que decían “usted primero” a sus rivales para salir los últimos, por lo que quedó un solo intento final en el Q3 con neumáticos difíciles de meter en temperatura… Al final, solo Leclerc y Ricciardo contentos.

Carlos Sainz y Fernando Alonso vivieron una jornada deslucida, aunque ambos entraran en el Q3. El primero, porque no estuvo a la altura de su compañero -con solo una vuelta en los libres- tras un error en la parte final del circuito. El asturiano incluso fue superado por su compañero Lance Stroll. Algo bastante poco habitual.

El día no había empezado bien, porque la FIA tampoco aceptó la apelación de Aston Martin para retirar la sanción de Shanghai. De aquí que Alonso tirara con bala al terminar la jornada: “La carrera clasificatoria no significa nada para mí, será un día para divertirse, pero no para nosotros”. Ya lo había avisado.

Mercedes se descalabra

La primera gran sorpresa saltaba por la banda de Mercedes. Toto Wolff no movía una pestaña cuando sus dos pilotos se quedaban atascados en el Q2. Por no pegar uno de sus famosos puñetazos en la mesa. “No había nada más en el coche”, se lamentaba el británico por la radio en la vuelta a boxes. Ya puede corregir el tiro el equipo alemán a riesgo de un soberano batacazo en los clasificatorios para el Gran Premio.

Otra sorpresa. McLaren desembarcaba en Miami con una espectacular evolución de su monoplaza, hasta el punto de que Zak Brawn lo denominaba “casi un B-spec”, una terminología ya en desuso en la Fórmula 1 y que en el pasado servía para identificar un coche prácticamente nuevo durante la temporada. El listado de novedades daba casi para dos folios en el comunicado de la FIA.

Pues bien, Lando Norris colocaba el coche en lo alto en los dos primeros bloques, y parecía amenazar a Verstappen. Mientras tanto, Alonso y Sainz pasaban también al Q3, aunque no con gran sensación de holgura.

Sainz: “No estoy contento”

El segundero del Q3 echó a andar, pero nadie salía a la pista. La acusada evolución del asfalto invitaba, al parecer, a un intento. Con el neumático blando no había opción al fallo, pero dar con la temperatura justa se convertía en el desafío. Y no errar con el volante.

Verstappen expresó al terminar el discurso que bastantes de sus colegas podrían hacer suyo. “Para ser honesto, fue terrible. Tal vez la última sesión fue increíblemente difícil para que los neumáticos funcionaran, porque ya en el Q2 no me sentía muy bien. Y en el Q3 me sentí similar. Realmente no mejoré mucho con el blando, pero estamos primeros. Lo aceptaré, pero no fue realmente agradable conducir por alguna razón”.

Cinco de los diez pilotos no mejoraron sus tiempos del segundo bloque. Empezando por Lando Norris, quien un error le mandaba a la novena posición, perdiendo una sangría de décimas. Tampoco mejoraba Sainz, quien había logrado colocarse en la cola del grupo, pero cometía un serio error en la curva 14 que le alejó del grupo de cabeza (terminó quinto).

El madrileño y el monegasco habían clavado a la décima los dos primeros sectores, pero el error en el último dejó al primero a tres décimas del segundo. Leclerc, que había dado solo una vuelta en los libres reconocía haber acertado para cocinar el neumático y se aupó a la estela de Max Verstappen.

Al terminar, Sainz confirmaba con sus palabras el rumbo errático de los tres bloques y el contraste con los libres, donde en todo momento rodaba fácilmente en el grupo de cabeza. Sin embargo, todo cambió al llegar los clasificatorios, a diferencia de Leclerc. “El coche cambió de comportamiento, desde los entrenamientos hasta la clasificación. Sufríamos bastante con la adherencia, costaba sacar las vueltas y juntar los sectores. Con el neumático blando venía en una vuelta buena, pero cometí un error en la curva 17. No estoy contento, pero espero que el fin de semana pueda dar la vuelta a partir del sábado”.

Alonso: “La carrera esprint no significa nada”

Fernando Alonso tampoco se mostraba demasiado suelto en los dos primeros bloques clasificatorios, y con poca experiencia con los blandos después de dedicarse a probar los duros en la única sesión de libres terminó octavo. “No se encontró mucho agarre en la pista hoy, era difícil leer el paso del medio al blando, por lo que las condiciones fueron bastante complicadas para la clasificación esprint”, explicaba Alonso, “pero fue lo mismo para todos y logramos llevar ambos coches a la Q3, que era el objetivo para hoy”.

Tras no ver su sanción retirada, Alonso no desperdició la oportunidad de recordar sus palabras de China, cuando avisaba que para el futuro prefería no salir a las carreras esprint si no era posible atacar. “La carrera esprint no significa nada, especialmente porque no podemos luchar, ni nada parecido. Nos penalizan por cualquier cosa que hacemos, así que mañana es un día para divertirse, pero no para nosotros. No será muy interesante”.