Cocina para uno: trucos y recetas del "single cooking"
El parmesano marinado también es rápido de preparar para una persona: saltear tomates cherry, piñones y ajo, espolvorear con sal y azúcar y rociar con vinagre balsámico, añadir trozos de parmesano y hojas de albahaca y listo.
A veces una hamburguesa del puesto de comidas; otras, un alimento precocinado del supermercado. Una persona sola rara vez se dedica a cocinar para ella misma. Es que no merece la pena este esfuerzo solo para uno… ¿o sí?
Suele ocurrir que quien regresa a casa tras un largo día de trabajo solamente desea una cosa: poner los pies para arriba y relajarse. Pero, siempre, aparece el hambre.
Entonces suele suceder que se echa mano a comidas rápidas como pizza congelada o un pan con fiambre. Porque la presunción generalizada es que cocinar no vale la pena, sobre todo no para uno solo.
La ecotrofóloga y autora Dagmar von Cramm está convencida de que sí. Porque la cocina fresca no solamente es sana, sino más económica que la comida elaborada o salir a comer y no necesariamente lleva mucho tiempo. Solamente es una cuestión de planificación.
“Lo mejor es tomarse un poco de tiempo el fin de semana y planificar. Eso alivia la alimentación para uno solo y también resuelve el alimentarse sanamente en general”, asevera.
La preparación es asimismo el credo de la autora de libros de cocina Margit Proebst. Su consejo es preparar ya durante la mañana los ingredientes para la noche, así no tendrá que buscarlos cuando regrese agotado de la jornada laboral.
A las raciones individuales -limpiadas rápidamente y con el aliño preparado en un tarro- siempre se les puede añadir ensalada.
Comprar verdura fresca y abastecerse
Von Cramm recomienda guarniciones como el cuscús o la cebada para recetas individuales. Mientras se cocinan, se pueden ir preparando otros ingredientes, como las verduras.
Se pueden preparar verduras en pequeñas unidades, como espinacas sueltas o judías verdes, pero también brócoli con sus ramilletes individuales o verduras congeladas que se pueden descongelar rápidamente en pequeñas porciones. El pescado y la carne también pueden comprarse frescos en el mostrador en porciones.
Una vez precocinada y congelada en porciones individuales, la comida se calienta y está en la mesa en un santiamén.
Y, para no llegar con hambre al supermercado, Margit Proebst recomienda tener provisiones. Junto a artículos secos como fideos o arroz, bien vale la pena contar siempre con hierbas, nueces, semillas o aceitunas y tomates en conserva.
“Ingredientes con los que se pueden condimentar rápidamente incluso platos sencillos”, explica Proebst. Para el chef de televisión y autor de libros de cocina Christian Henze, la salsa de chile dulce, la salsa de soja y el tandoori no deberían faltar en ninguna alacena.
La serie de recetas relámpago de Henze, de las cuales publicó recientemente también una versión vegetariana, reúne ideas que pueden prepararse con un máximo de cinco ingredientes, a veces incluso en menos de diez minutos.
Mientras se cuece una guarnición primaveral como la quinoa o el cuscús, se puede cortar en dados algunas verduras y tofu, y el bol estará listo.
Sin embargo, para ello siempre se necesitan los llamados “ingredientes básicos” como aceite, sal, harina y otros alimentos esenciales.
Las recetas están pensadas para dos personas, pero sus cantidades pueden reducirse fácilmente a la mitad para preparar un plato unipersonal.
Parmesano marinado con tomates cherry caramelizados
Una de sus recetas exprés es el parmesano marinado con tomates cherry caramelizados. Para una persona se precisan 75 gramos de parmesano, 75 gramos de tomates cherry, tres hojas de albahaca y una cucharada de piñón.
Añadiendo al arroz ramilletes individuales de coliflor, guisantes del congelador y unos cuantos tomates cherry frescos se tendrá una ración individual, sin necesidad de apelar al cuchillo y la tabla para cortar ingredientes.
Además, se necesita ajo, aceite de oliva, sal, pimienta y azúcar, así como vinagre balsámico de caldo.
En primer lugar, parta el parmesano en trozos gruesos y corte los tomates cherry por la mitad. Caliente un poco de aceite de oliva en una sartén, añada los tomates, los piñones y medio diente de ajo finamente picado, espolvoree con sal y media cucharadita de azúcar y sofría brevemente para que se caramelice.
Desglase con 1,5 cucharadas de vinagre balsámico oscuro, añada el parmesano y las hojas de albahaca desmenuzadas, sazone con pimienta y remueva todo brevemente en la sartén hasta que el queso empiece a fundirse. Henze recomienda servir con el clásico pan italiano ciabatta.
Elaboración y preparación de comidas
Von Cramm apunta que la forma más sencilla y rápida de elaboración es friendo en la sartén. Al igual que en el clásico “Street Food”, las pequeñas cantidades pueden prepararse según se desee.
La alimentación de una persona sola también puede lograrse sin estrés mediante la preparación de comidas, la precocción y el almacenamiento de alimentos.
Basta con cocinar un plato para varias raciones y consumirlo en los días siguientes o congelarlo. Pero Margit Proebst advierte del peligro de cocinar con antelación cantidades demasiado grandes, sobre todo cuando se tiene hambre, ya que esto tienta rápidamente a comer por demás en lugar de almacenar las raciones.
Pero, una vez que el plato ya se encuentra congelado -idealmente en porciones y plano en una bolsa para alimentos congelados- puede calentarse perfectamente en el microondas.
“En todas las cocinas hay un microondas para poder calentar”, recomienda Christian Henze. Además, con el microondas se mantiene bajo el consumo de energía y también se ahorra dinero.
Un coliflor, muchas posibilidades
Si tiene antojo de col o calabaza, por ejemplo, o sea alimentos que no rinden fácilmente en una comida para una sola persona, debe pensarse de antemano en los distintos platos que pueden prepararse con ellos.
Por ejemplo, la coliflor puede convertirse en sopa, ensalada o curry. Para este último, se necesitan unos 250 g de coliflor, 100 g de guisantes congelados, una cucharadita de curry en polvo y cinco cucharadas de crema de leche. Añada un diente de ajo, un trozo de jengibre fresco -de 1 cm aproximadamente- y una cebolla pequeña.
Primero, pique finamente el ajo, el jengibre y la cebolla y caliéntelos en una olla con un poco de aceite neutro durante dos minutos. A continuación, añada los ramilletes de coliflor y el curry en polvo y sofría durante un minuto.
Desglase con dos cucharadas de agua y cueza al vapor, tapado, a fuego lento durante 10 minutos. A continuación, agregue los guisantes sin descongelar y la nata, cocine tapado a fuego lento durante otros cinco minutos y sazone con sal y pimienta. Sirva con arroz basmati cocido aparte.
Las recetas del libro incluyen clásicos como el Wiener Schnitzel y las patatas con salsa verde, así como platos ligeros como el minestrone o la ensalada griega. La ensalada en particular -limpia y con el aliño preparado en un tarro de conserva- puede volverse el acompañamiento de cualquier comida.
Con un poco de planificación, cocinar alimentos frescos no es complicado ni requiere mucho tiempo con los ingredientes y los métodos de cocción adecuados. Sin embargo, ya sea para uno mismo o para la familia, no es algo para cualquiera.
Margit Proebst tiene una opinión más relajada: “Cocinar no tiene la misma importancia para todo el mundo, un producto precocinado también está bien, pero cocinar alimentos frescos debería ser posible un par de veces a la semana y también es bastante sensato”. Su salud y su billetera se lo agradecerán.
dpa
©2023 dpa GmbH. Distribuido por Tribune Content Agency, LLC.