Acción Popular y el desmadre como doctrina
Acción Popular y el desmadre como doctrina
La crisis de Acción Popular no parece tener fondo. La reciente denuncia de Latina en contra del vocero de la bancada, Darwin Espinoza, por utilizar recursos públicos para formar su propio partido, golpea en el suelo a una agrupación que supo de mejores momentos.
“Es la sombra de lo que fue”, dijo Mesías Guevara, expresidente de AP y exgobernador de Cajamarca. Añadió: “El reto ahora es de los militantes de base, para retomar la ruta de Belaunde y Paniagua”.
Guevara renunció en noviembre del 2023 a AP. “Mi discrepancia con la bancada cuya actuación está signada por valores muy distantes de principios éticos. Muchos de sus miembros están sindicados como ‘niños’ y ‘mochasueldos’, otros se han convertido en seguidores del Foro de Madrid”, escribió en su carta de despedida. Hoy forma parte del Partido Morado.
El último candidato presidencial de AP, Yonhy Lescano, también se alejó un mes después, en diciembre.
“Era imposible recuperar el partido. Se quiso hacer. Se pensó que habría una nueva dirigencia que podría recomponer las cosas; sin embargo, no se quiere hacer nada, no hay capacidad de rectificación”, declaró entonces en una entrevista con este diario. Ahora busca inscribir su propia agrupación con la ayuda de gente de Puno.
“Estamos tratando de ordenar las cosas y recomponernos”, comentó Juan José Abad, actual secretario general de AP. Huancavelicano, fue diputado de 1990 a 1992. En noviembre accedió al cargo. Reemplazó a Edmundo Del Águila Morote.
Las duras peleas internas por ver quién asumía la conducción partidaria se ventilaron en los medios de comunicación.
Las elecciones del 2021 entre Del Águila y Julio Chávez Chiong,exalcalde de San Martín de Porres, derivaron en abierto conflicto. Cálculos iniciales hacían suponer que Chiong había ganado. Pero el Comité Nacional Electoral (CNE) del partido decidió ampliar el plazo a fin de que se presentaran pruebas sobre “posibles hechos irregulares ocurridos el día de la jornada electoral”.
Abad recuerda que se anularon 19 mesas, suficientes para que Del Águila se impusiera sobre Chávez Chiong por un margen muy escaso, de aproximadamente 60 votos.
Por casi dos años AP no supo quién era su secretario general. Recién en julio del 2023, el Registro de Organizaciones Políticas del Jurado Nacional de Elecciones reconoció a Del Águila.
En medio del desmadre, Abad había ganado las internas de mayo. La República reportó en su momento que hubo denuncias de irregularidades. Incluso, en un oficio, la Oficina Nacional de Procesos Electorales (ONPE) anunció que no participaría del proceso.
Del Águila insistió en medios de comunicación en que él debía ser secretario general hasta julio del 2025 para cumplir los dos años de cargo efectivo. Dio entrevistas en ese sentido. Sin embargo, para el ROP, el secretario general es Abad. Así consta en la página web.
El desorden de los dirigentes se traslada, por supuesto, a la representación parlamentaria. A las varias denuncias por corrupción se suma el hecho de que hay dos facciones: los que se quedaron en la bancada original y quienes renunciaron a ella—Maricarmen Alva, José Arriola, Ilich López, entre otros—, y que buscan inscribir el grupo Fernando Belaunde Terry. Especialistas han advertido que el reglamento del Legislativo no permite que militantes de un partido integren una bancada distinta, por lo que esta pretensión no tendría éxito.
“No hay mayor contacto de la bancada de AP con el Comité Ejecutivo Nacional. Ellos pidieron reunirse con nosotros, lo estábamos evaluando, pero con esta nueva denuncia no veo que sea viable. Sería una vergüenza tener contacto con él (Darwin Espinoza)”, señaló Abad.
Abad le ha solicitado a la facción disidente que pida su reincorporación a la bancada para que, entre todos, designen a otro vocero en lugar de Espinoza. “También llamé a Wilson Soto, el vocero alterno y mi paisano, para plantearle la misma idea”, comentó el dirigente. El asunto está en evaluación.
RDC pide incorporarse al comité político
En una carta enviada a Juan José Abad, Raúl Diez Canseco pidió ser registrado como miembro del Comité Político, del Plenario Nacional y del Congreso Nacional de AP “con las prerrogativas que otorga el estatuto a los exsecretarios generales nacionales”. En efecto, Diez Canseco fue secretario general entre1993 y1995. Abad explicó que en el partido hay cierta resistencia de parte de dirigentes antiguos contra Diez Canseco por su renuncia en el 2002. “Dicen que, de acuerdo al estatuto, habría perdido sus prerrogativas, aunque yo considero que eso solo ocurre con militantes expulsados por faltas graves”, comentó. Sobre Alfredo Barnechea, Abad dijo que le parecía una opción presidenciable.