Me chirrían los frenos. ¿Debo cambiar las pastillas?
Los frenos es una de las partes del vehículo que mejor te avisa de que deben ser reparados. Ese chirrido agudo significará que deben ir a revisión, pero además de las pastillas puede que otras partes estén desgastadas y sean las culpables de ese sonido. Además, existen algunos casos en los que ni si quiera deben ser reparados. Quédate y conoce todos los detalles sobre este ruido tan particular y qué puede significar.
Puede ser que te haya pasado que cuando estás frenando en un semáforo escuchas un ruido agudo y te preocupes si son tus frenos. En algunas situaciones puede ser problema del coche de al lado, pero si lo sigues escuchando, seguramente, este ruido tan característico venga de tu propio coche. ¿Qué tengo que cambiar entonces?
El ruido puede venir de distintas partes
La primera y más normal es debido a que la pastilla de freno está muy gastada. En esta situación habrá un choque entre dos piezas de metal, el ferodo y el disco y el chirrido vendrá por esa parte. Este además es muy desagradable por lo que recomendamos ir urgentemente al taller. Otra situación ocurre porque algunos fabricantes colocan una chapa acústica que sirve de avisador de que la pastilla está a punto de acabarse.
Otra opción puede ser que el disco se esté desgastando. Este ruido puede venir de cuando una pastilla, también desgastada, toca en la rebaba de la disco generada por el uso y el desgaste de los mismos. Este ruido suele ser más suave que el anterior y suele ocurrir al frenar a baja velocidad.
Si llevas mucho tiempo con un coche parado, puede que también te suene y pienses que cambiar los discos. Esta deducción puede que sea errónea ya que cuando un coche lleva mucho tiempo sin utilizarse los discos acaban oxidándose y eso es lo que genera el ruido. Después de un tiempo utilizándolos, el óxido desaparecerá y dejará de hacer ruido.
Cada cuanto cambiar las pastillas de los frenos y cuánto cuesta
Aunque una manera de saber que debes cambiar las pastillas de los frenos es afinando el oído y hacerlo cuando escuchas ruido en ellos, los expertos también ponen una fecha para hacerlo. En este caso, es recomendable sustituirlas cada 30.000 y 60.000 kilómetros. Esta horquilla es tan grande ya que dependerá de si la conducción es agresiva o no, si circulas más por ciudad o carretera o lo cargado que lleves el coche. El precio de un juego de pastillas de freno suele rondar los 50 euros, aunque habrá que sumarle la mano de obra que variará dependiendo del taller al que lo lleves.
"He cambiado las pastillas y sigue chirriando"
Esta frase suele ser algo habitual, aunque no te debes asustar por ello. Esto ocurre debido a que antes de montar la persona del taller debe quitar un pequeño protector que viene en las pinzas y si no se hace puede que, durante los primeros kilómetros, estas chirríen al entrar en contacto con los discos.