¿Qué pasa si duermo con mi perro todos los días?
A lo largo de las décadas, las relaciones entre las personas y sus mascotas han evolucionado hasta el punto de considerar a estos animales como parte integral de la familia. Como resultado, perros y gatos han asumido roles emocionales y de cuidado dentro de los hogares.
Algunos comportamientos indeseados de las mascotas pueden ser resultado de este tipo de permisos.
Mientras que algunos animales pequeños, como los hámsteres, pueden tener comportamientos como morder objetos o escaparse, y su entrenamiento puede ser complicado, lo que hace que dormir con ellos no sea aconsejable, con animales más grandes y domésticos, como perros y gatos, la decisión de compartir la cama suele ser una cuestión de preferencia personal. Si bien las mascotas brindan confort y afecto, hacerlo puede provocar alergias o dificultades para conciliar el sueño. Por lo tanto, los propietarios deben sopesar los beneficios y riesgos antes de decidir si permitirán que su mascota duerma con ellos.
La Fundación Nacional del Sueño, una organización estadounidense especializada en salud y descanso, señala que algunas personas eligen tener perros para sentir seguridad y protección. Los perros de servicio, en particular, pueden brindar apoyo emocional a individuos con trastornos como el estrés postraumático al detectar señales de pesadillas y despertar a la persona afectada, interrumpiendo así el episodio y proporcionando alivio.
Gabriel Rojas, médico veterinario de la clínica veterinaria Ottovet en Bogotá, asegura que no suele haber efectos negativos en personas que decidan dormir con sus perros, siempre y cuando los dueños no tengan una reacción alérgica ante ellos. Incluso, hoy en día, existen alimentos que hagan que algunos animales, como los gatos, no liberen una proteína para evitar las reacciones alérgicas en los animales. “Mi hijo duerme con la mascota todos los días, y no ha habido ningún impedimento para ello”, explica Gabriel.
Algunos comportamientos indeseados de las mascotas pueden ser resultado de este tipo de permisos, según explica el veterinario. El dejarles dormir en la cama o comer en el cuarto puede resultar en problemas de comportamiento, por lo que se debe desarrollar con algunas prevenciones. “No obstante, en general, esto suele tener más resultados positivos que negativos”, explica el experto.
La Fundación Nacional del Sueño afirma que contar con una mascota puede ser beneficioso en varios aspectos. Estos compañeros pueden reducir la ansiedad y la sensación de soledad, aliviar problemas de salud mental y contribuir a la regulación emocional, proporcionando un sentido y propósito de vida. Esto se debe a que el amor incondicional de una mascota puede aumentar los niveles de oxitocina en adultos y reducir los niveles de cortisol en niños, asociados con la relajación y la reducción del estrés.
El contacto físico con una mascota parece tener un efecto relajante significativo, lo que explica por qué acurrucarse con un perro puede calmar la mente y fomentar la tranquilidad. Muchas personas afirman que dormir con su mascota mejora la calidad de su sueño. De hecho, varios estudios han sugerido que las personas que tienen mascotas son menos propensas a depender de medicamentos para dormir en comparación con aquellas que no tienen compañeros animales.
Además de los beneficios emocionales, las mascotas también impactan positivamente en la salud física. Según la Fundación Nacional del Sueño, se ha demostrado que tener una mascota reduce los niveles de colesterol y triglicéridos, así como la presión arterial. La posesión de un perro, en particular, está relacionada con un menor riesgo de mortalidad, posiblemente debido a estos efectos positivos en el sistema cardiovascular.