Panamá elige presidente buscando solucionar tres frentes
Panamá elige presidente buscando solucionar tres frentes
Panamá celebrará este domingo, en tan sólo una vuelta, las elecciones presidenciales más polémicas de los últimos diez años con ocho candidatos y uno que navega a la sombra de un popular exmandatario condenado y asilado en una embajada.
Alrededor de tres millones de personas están habilitadas para votar y así elegir a su próximo presidente que gobernará durante cinco años, pese a que no todo es una fiesta democrática en el vecino país. Durante la última semana, Panamá vivió una crisis política y electoral, que incluso amenazó con revivir una impugnación del candidato del partido Realizando Metas, José Raúl Mulino, quien lidera las encuestas, pero salvado a última hora por la Corte Suprema de Justica, al declarar constitucional su postulación.
Mulino encabeza las encuestas con un 37% de favorabilidad según la firma Gallup, le sigue con un empate técnico entre el 15% y el 13% al candidato de Movimiento Otro Camino, el exconsul Ricardo Lombana, y el expresidente socialdemócrata Martín Torrijos, hijo del general Omar Torrijos, quien su mayor éxito internacional fue la negociación con Estados Unidos, para devolver el control del Canal de Panamá, al Gobierno del otro lado del Darién.
Siguen el exconsul del Cambio Democrático, Rómulo Roux, con el 11% de preferencia, la candidata del Partido Revolucionario Democrático, Zulay Rodríguez, con 10%; el actual vicepresidente, José Gabriel Carrizo, aparece con el 5% de favorabilidad, y por último los candidatos independientes Melitón Arrocha con 2% y Maribel Gordón con 1%.
Todos los candidatos mencionados anteriormente han prometido combatir la corrupción y recuperar la bonanza económica de la última década. En Panamá también se elegirán 71 diputados y gobiernos locales.
¿Quién es José Raúl Mulino?
Candiato presidencial panameño José Raúl Mulino. (GettyImages)
Es un político que nació de repente en la óptica panameña, pero es hoy, quien puede convertirse en el próximo presidente del vecino país; como abogado y con 64 años de edad, este licenciado de la Universidad Santa María de manera taciturna fue eje en la formación de la dirigencia Cruzada Civilista que logró derrocar al general Manuel Antonio Noriega a finales del 89, con apoyo del ejército estadounidense. Su máximo alcance político derivó en ser ministro de Seguridad del gobierno de Martinelli entre los años 2009 y 2014.
A pesar de sus visiones de derecha, fue el primer diplomático panameño en visitar Rusia como canciller a mediados de los años 90, lo que lo prepondero para dos años después, ser magistrado suplente de la Sala de lo Civil de la Corte Suprema. Casado desde 1985 con Maricel Cohen, matrimonio el cual, ha derivado en cuatro hijos y cuatro nietos.
La crítica de Rubén Blades
Activismo político del cantautor panameño Rubén Blades. (GettyImages)
El famoso cantautor salsero, Rubén Blades, quien también se ha convertido en un líder político, desde los últimos dos meses ha criticado la candidatura de Mulino, por lo que desde hace una semana, ha llamado a sus compatriotas para oponerse, con el “canto a bandera” de juzgar a Martinelli y su “delfín político”, como testaferros corruptos.
Palabras que nacieron tres días después que la Corte Suprema de Justicia (CSJ) declarara constitucional la candidatura de Mulino, impugnada por no haber sido decidida en elecciones primarias ni llevar vicepresidente en la nómina, como manda la ley.
La sombra de Ricardo Martinelli
La actualidad del expresidente, Ricardo Martinelli, es estar en su país y al mismo tiempo no, buscando de todas las formas posibles expresar su visión de nación, así sea con otro cuerpo, como lo es para muchos, la candidatura de José Raúl Mulino; lleva a cuestas una condena de once años de cárcel desde su asilo en la embajada nicaragüense en Panamá, e intentando sortear los obstáculos judiciales y de corrupción, mientras un alto porcentaje electoral, aún lo dibuja como un gran estadista que llevó a Panamá a una bonanza económica.
Corrupción: el verdadero problema de Panamá
Panamá desde 1904 tiene dolarizada su economía, luego de separarse de Colombia, por lo que durante un siglo ha mostrado algo de estabilidad como resultado de bajos índices de inflación y un aumento en la confianza de los inversionistas registrando hoy día un crecimiento del 7,3% en 2023, pero por una serie de factores el Fondo Monetario Internacional prevé que Panamá de un salto al 2,5% en el presente año.
Y el porqué, se dibuja en un alto índice de corrupción gubernamental, que ha generado que el 45% de los trabajos sean informales, mientras que el desempleo está en un 9%; un tercio de la población rural se encuentra en pobreza. Extrañamente el poder adquisitivo ha caído en un 10% desde el 2016, pero sigue manteniendo una visión de país capitalista, incluso alejándose del escándalo de los ‘Panamá Papers’, que lo ha calificado como un ‘paraíso fiscal’.
El Canal de Panamá
La joya de la corona panameña, el Canal de Panamá, ha reducido su tránsito de buques, debido a la sequía que ha provocado el Fenómeno de El Niño, produciendo una baja en los niveles de su afluente de un 15%. Por ahí pasa el 6% del comercio marítimo mundial, pero que en los últimos dos años, no ha visto equilibrar su balanza adquisitiva frente a otros puertos en el mundo.
Crisis migratoria
Panamá se ha convertido en el primero de tres puntos donde fluyen miles de personas en búsqueda de llegar a Estados Unidos; tan sólo en 2023 cruzaron medio millón de migrantes por el Tapón del Darién, un estrecho selvático que dibuja la frontera colombo-panameña.