Lara Álvarez rompe a llorar tras contar, tras 28 años en silencio, la historia de bullying que sufrió en el colegio

Lara Álvarez en LOS40 Music Awards 2023. (Photo by Patricia J. Garcinuno/WireImage)

Este 2 de mayo se ha conmemorado el Día internacional de la lucha contra el bullying y Lara Álvarezha querido compartir su relato personal con este tema para ayudar a crear conciencia. Dos días antes compartía una entrevista que le hacía

“Después de poner el avance de la entrevista con la @fundacioncolacao no os podéis imaginar la cantidad de mensajes de padres y niños que he recibido… 7 de cada 10 niños sufren algún tipo de acoso en España… has leído bien: 7 de cada 10”, escribía en su Instagram.

“Y ahora, además, la nueva y asquerosa manera de intimidación y persecución a través de las redes sociales, el ciberbullying. Ojalá seamos capaces de erradicar pronto esta desgarradora situación para nuestros niños. Hasta que ese momento llegue y si eres tú quien está sufriendo bullying, CUÉNTALO. No te calles. CUÉNTALO. El acosador busca aislarte, que te sientas indefenso y solo… y no lo estás. ❤️ N O L O E S T Á S 🫂”, añadía.

Grababa un vídeo en el que recordaba que se siguen dando muchos casos de acoso escolar que crean situaciones indescriptibles. Ella pasó por eso cuando tenía 9 años y ahora lo cuenta para lanzar un mensaje a todos aquellos que están pasado por eso: “Del bullying se sale”.

Insiste en la importancia de contar lo que está sucediendo y rodearse de las personas en las que confíes que son las que te ayudarán a salir de esa situación.

La historia en primera persona

Contaba cómo, cuando era niña, la seleccionaron para un concurso de canto y baile y quedó segunda. Llegó con el premio al colegio y no supuso una alegría. Sus compañeros dejaron de hablarla. “Recuerdo irme a casa muy triste”, aseguraba rompiendo a llorar, “no entiendes nada, eres una niña, vas ilusionada, compartes algo que es muy especial en tu vida y, ¿tus compañeros te reciben así?”.

Recuerda que intentó calmarse para que sus padres no notaran nada porque no sabía qué explicarles. Al día siguiente volvió al cole y siguió soportando la misma situación, incluso peor, “recuerdo estar en el patio del colegio y recibir balonazos o recuerdo un día que recibí hasta pedradas. Una vez me tiraron un chicle en el pelo y que me siguieran al portal de mi casa por detrás con insultos y una sensación de no saber cómo enfrentar eso”.

Dos niñas fueron las que provocaron esta situación. Una de ellas la vio en el baño del colegio llorando porque había escuchado una noticia desagradable en su casa y la pidió disculpas. Lejos de sentirse aceptada y protegida, la niña se lo contó al resto de compañeros y la amenazaron con contarle a su madre que había desvelado su situación en casa.

Recibía llamadas con amenazas en su casa y ahí fue cuando sus padres se dieron cuenta de lo que estaba pasando. “Qué suerte poder hablar, qué necesario poder hablar. Cuántas cosas entienden cuando puedes sacar todo lo que llevas dentro”, recuerda. Darse cuenta de que no era un problema suyo por algo que pudiera haber hecho, la ayudó.

Su madre decide darle la vuelta a todo lo sucedido y como se acerca su cumpleaños, piensa que sería buena idea invitar a la clase, excepto a aquellas dos niñas, a su fiesta. No fue nadie.

Tras el verano se cambió de cole y en su nueva clase se encontró con una de las niñas que lo había comenzado todo. “Era como una pesadilla, me empezaron los ataques de ansiedad, los dolores de tripa, de cabeza”, relata y le dijo a su madre que no podía ir al cole.

Entonces el jefe de estudios del colegio le hizo cambiar la situación. “Nosotros podemos poner todos los medios, podemos castigar a esta niña, podemos tener medidas muy duras, pero hasta que no entiendas que el límite lo tienes que poner tú, esto te va a perseguir toda la vida”, le dijo en aquel momento.

No cambió la situación de un día para otro, pero le hizo abrir los ojos y dar un golpe en la mesa respaldada por la comunicación con sus padres, sus profesores y la situación.

Del bullying se sale, eso es lo que ha querido transmitir contando esta historia 28 después de vivirla en primera persona.