Cómo masturbarte en la ducha y qué juguetes puedes usar

Cómo masturbarte en la ducha y qué juguetes puedes usar

El universo del autoplacer es infinito. Con ello, nos referimos a que es una cuestión tan personal, que generalizar sobre las mejores fórmulas o dar trucos sobre cómo masturbarse resulta algo abstracto. Aun así, es cierto que existen datos que ayudan a hacerse una idea sobre la masturbación. Por ejemplo, según el ‘XI Barómetro de Control Los españoles y el sexo’, el 94% de las personas en nuestro país la practica. Actualmente, hay menos diferencia entre hombres y mujeres, pero (aquí es donde viene la sorpresa) ellas suelen iniciarse en la ducha. Este último dato lo corrobora un estudio reciente de la firma de juguetes eróticos Womanizer, que afirma que 7 de cada 10 mujeres de todo el mundo se autosatisfacen de este modo, y más de la mitad recuerda que la primera vez fue antes de cumplir los 18. En concreto, en España, el 34% de las féminas aprovecha el momento del baño para tal fin y un 20% lo hace, como mínimo, una vez a la semana. ‘Pss’: ficha 10 curiosidades sobre la masturbación femenina realmente alucinantes.

Explora todas las posibilidades

Las ventajas son muchas: “La masturbación en sí aporta beneficios físicos (como la mejora de la piel) y emocionales (aumentan las endorfinas, dormimos mejor…). Pero hacerlo en la ducha puede resultar estimulante, porque la potencia de los chorros es genial para jugar con otras zonas como el cuello, los pezones, el abdomen… de manera diferente”, cuenta la sexóloga Ana Lombardía. (Mira aquí, además, este testimonio sobre lo que opina una sexóloga sobre masturbación).

“Lo mejor es la cantidad de opciones que existen –añade la sexóloga Mónica Branni– ya que también se pueden usar vibradores sumergibles con los que se consiguen orgasmos mucho más intensos”. Eso sí, Branni recomienda medir la presión y la temperatura antes de ponerse a ello y, sobre todo, no realizar duchas vaginales porque pueden provocar infecciones. Hechas estas salvedades, si todavía no has probado o ya lo has hecho pero te apetece descubrir cosas nuevas, sigue leyendo y toma nota de estos consejos.

EL ‘GADGET’ DEFINITIVO

¿Sabías que ya existe el primer cabezal de ducha del mundo creado para la masturbación? Se llama ‘Womanizer Wave’ y lo hemos probado.

Si te estás preguntando cómo funciona, te contamos que tiene tres tipos de chorros de placer: ‘Pleasure Jet’, que es el más potente; ‘Pleasure Whirl’, una especie de torbellino que se mueve en espiral, y ‘Powder Rain’, una lluvia muy suave. Nuestro preferido es el segundo, porque el agua sale disparada con un inesperado movimiento y genera una sensación nunca antes experimentada (quizás puedas conseguir un ‘squirt’ de una vez por todas, ahí queda eso).

El cabezal es superfácil de usar, ya que con una sola mano puedes cambiar el modo y la potencia (gracias a dos botones que incluye). Un plus: su tecnología ‘EcoSmart’ permite reducir el consumo de agua en un 60%. Maravilla. Su precio es 129 €.

‘Tips’ para disfrutar bajo el agua

Para gozar de una experiencia increíble resérvate un rato a solas y sigue estas recomendaciones de la firma de juguetes eróticos Platanomelón.

Erotiza el ambiente

Las velas y las luces tenues te ayudarán a relajarte. Para potenciar la experiencia, elige también una ‘playlist’ o un audiolibro erótico y ayúdate de un vibrador ‘waterproof’ como el ‘Mini Diva’.

Apuesta por los contrastes

La alcachofa de la ducha aporta unas sensaciones únicas. Cambia la temperatura e intercala calor con frío (sin pasarte, claro), varía tu posición… Pero, para ahorrar agua, intenta empezar cuando estés muy excitada.

Expande las sensaciones

Aprovecha el calor y el desliz del agua para acariciar el órgano sexual más erógeno que tienes: tu propia piel, y también los pezones y otras zonas sensibles como el cuello, la espalda, el interior de los muslos o las ingles.

Juega con la potencia

Intercala los chorros alejando y acercando el cabezal a las diferentes partes de tu cuerpo y pon más o menos presión, según lo que desees. También puedes abrir y cerrar el grifo de forma alternativa.

¡A jugar!