Así se transforma el cuerpo de una mujer tras un mes haciendo Crossfit
Así se transforma el cuerpo de una mujer tras un mes haciendo Crossfit
Para las que no nos hemos tomado demasiado en serio el deporte nunca, lo de empezar a hacer crossfit puede parecer una locura. Se trata de un entrenamiento centrado en movimientos funcionales, variados y de alta intensidad, que incluye ejercicios de otras modalidades, como levantamiento de pesas, cardio y gimnásticos. A priori, la dosis perfecta para sufrir de manera voluntaria. Pero también, una forma muy efectiva de motivarte y conseguir grandes cambios en tu cuerpo en tiempo récord.
Los entrenamientos de crossfit “son cortos pero intensos, con un énfasis en mejorar la resistencia, fuerza y otras habilidades físicas”, aseguran desde el box La Catedral (lugar donde me he dejado la vida este último mes). Pero además de sudar como nunca y de aprender a vivir con agujetas, apuntarme a crossfit ha sido la mejor decisión que he tomado en mucho tiempo.
Así ha cambiado mi cuerpo gracias al crossfit
Los entrenamientos en crossfit son cortos pero intensos, con un énfasis en mejorar la resistencia, fuerza y otras habilidades físicas. Estos son, precisamente, los primeros cambios que he notado en mi cuerpo. Ahora que acabo de cumplir un mes practicando estos entrenos de alta intensidad, noto que mi capacidad de resistencia ha aumentado. Cada vez que voy a realizar un AMRAP (hacer tantas repeticiones como sea posible), noto que me canso mucho más tarde que al principio y cada vez consigo acabar más rondas.
Sumado al aumento de la resistencia, también he notado un gran cambio a mejor en mi flexibilidad y al mismo tiempo, he conseguido desarrollar más el equilibrio y la coordinación. Esto, contra todo pronóstico, me permite ser mucho más ágil cuando practico los ‘Hang Snatch’ o cuando hago otro tipo de actividades, como subir a la cuerda.
Por supuesto, aunque en menor medida, ya que sólo llevo un mes inmersa en este entrenamiento, también he empezado a notar cómo mi musculatura se va fortaleciendo poco a poco. Además, mi cuerpo está más estilizado, principalmente en la zona de los brazos, los hombros y el abdomen.
Beneficios para la salud mental
Pero en este mes no sólo he ganado beneficios físicos. El crossfit también es capaz de aportar grandes ventajas para la salud mental y una de ellas, en mi caso, ha sido la reducción del estrés. Realizar esta actividad hace que me olvide de todo durante una hora, por lo que practicarlo 3 veces a la semana, me ayuda a evadirme del estrés y el ritmo acelerado de la rutina diaria.
Además, visitar el box también hace que aumente mi concentración y mi motivación. Para practicar el entreno de cada día, primero hay que prestar mucha atención a las explicaciones del coach, y los nombres de cada ejercicio no lo ponen demasiado fácil. Al mismo tiempo, al entrenar con un grupo de gente que también intenta sobrevivir durante esos 60 minutos la motivación aumenta, y esto hace que cada día tenga más ganas de ir a hacer crossfit.