Rusia dice haber destruido cinco cazas SU-27 ucranianos en el aeródromo de Mýrhorod

FOTO DE ARCHIVO: Soldados del ejército estadounidense caminan junto a aviones de combate Su-27 ucranianos durante el simulacro militar multinacional Clear Sky 2018 en la base aérea de Starokostiantiniv en la región de Jmelnitski, Ucrania. 12 de octubre de 2018. REUTERS/Gleb Garanich

MOSCÚ, 2 jul (Reuters) -El Ministerio de Defensa de Rusia dijo el martes que había destruido cinco cazas SU-27 ucranianos y dañado otros dos en el aeródromo de Mýrhorod, en la región ucraniana de Poltava, con misiles Iskander-M.

Ucrania afirmó que se había producido un ataque en el aeródromo, pero que Rusia estaba exagerando los daños causados. Aun así, Ucrania no detalló exactamente los daños.

El  Ministerio de Defensa de Rusia publicó imágenes del ataque que mostraban humo y llamas saliendo del aeródromo. No precisó cuándo tuvo lugar.

"Como resultado del ataque ruso, cinco cazas polivalentes SU-27 en activo fueron destruidos y dos resultaron dañados", dijo el Ministerio.

Rusia está atacando aeródromos ucranianos justo cuando Kiev se prepara para recibir los primeros F-16 diseñados por Estados Unidos, que Moscú ha prometido destruir.

Un oficial de la fuerza aérea ucraniana, Yuri Ihnat, dijo que se había producido un ataque contra Mýrhorod.

"Hubo un ataque. Hay algunas pérdidas, pero no las que afirma el enemigo. Después de todo, siempre han hecho esto desde el comienzo de la invasión", escribió Ihnat en un comunicado en Facebook a última hora del lunes.

Blogueros militares ucranianos informaron de que un dron de reconocimiento ruso había podido sobrevolar el aeródromo para ayudar a realizar el ataque.

"No hay medios suficientes para destruir los drones (de reconocimiento)", dijo Ihnat a Reuters el martes al ser preguntado por este tipo de aviones no tripulados, que según él representan una "amenaza muy seria".

"Vuela e informa de todo en tiempo real, luego Iskander llega en un par de minutos. Es evidente".

(Información de Reuters; escrito por Lidia Kelly en Melbourne; editado por Guy Faulconbridge y Mark Trevelyan; editado en español por Javi West Larrañaga)