El truco de los hoteles para dejar las toallas suaves está en este ingrediente que tienes en casa

.

Cómo explicar la sensación que produce, tras una buena ducha, un secado total con una toalla de lo más cómoda como la que podemos encontrar en los hoteles. Y es que, para nadie pasa desapercibido el olor "a limpio" de estas cómodas y agradables telas presentes en los hoteles, tan esponjosas y suaves.

Se trata de un olor especialmente característico y que en alguna ocasión seguro que se ha preguntado cómo conseguirlo en sus toallas de casa. Pues bien, aquí le traemos el truco definitivo con el que podrás conseguir la misma textura, olor y suavidad en las toallas.

Para ello no es necesario apuntarse ninguna marca o tipo de tela en concreto, sino seguir un simple consejo de lavado que es el utilizado en los hoteles y lavanderías. Pero, ¿cuál es ese truco? Utilizar vinagre blanco.

Sí, leen bien. Usar vinagre blanco es uno de los trucos mejores guardados de los hoteles para que sus toallas, sábanas y mantas huelan de esa tan forma tan peculiar e intensa. Aunque puede sonar raro, este 'ingrediente' es clave para conseguir una limpieza total, conseguir suavizar las fibras de la tela y alargar la vida útil de las toallas durante un tiempo.

En primer lugar, habrá que lavarlas separadas del resto de las prendas para que puedan limpiarse y enjuagarse de forma correcta. Para ello, la técnica que hay que llevar a cabo es introducir un poco de detergente (50 ml) y sustituir el suavizante por 20ml de vinagre blanco.

A continuación se tendrá que elegir el programa con la temperatura más alta, como pueden ser 60ºC y la lavadora hará el resto, eliminando todas las bacterias y gérmenes durante el lavado.

En cuanto al olor del vinagre blanco, no hay que preocuparse, ya que con el lavado y el detergente, el fuerte olor desaparece sin problemas. Por último, y solo de forma opcional, se puede completar el proceso con un ciclo de centrifugado adicional y así eliminar lo que pueda haber sobrado de agua.