¿Qué es el LWD? La tendencia que ya tienes en tu armario y debes aprender a combinar

Las siglas LBD las conocemos muy bien. Vamos, el concepto del Little Black Dress (pequeño vestido negro) o Petite Robe Noir –como sus orígenes franceses indican– creado en octubre de 1926 por Coco Chanel es tan universal como atemporal. Irónicamente, nos ha quedado claro que se trata de un lienzo en blanco de donde todas podemos partir para crear un estilismo. Es elegante, sencillo y tan versátil que es habitual leer que es una de esas prendas que debemos tener el armario sí o sí. Y lo entendemos y lo amamos. Pero también debemos aceptar que cada temporada aparece un nuevo vestido que se presenta como rival. En primavera normalmente se antoja sustituirlos con vestidos de lunares o de flores, pero el 2024 llega con un nuevo vestido y un nuevo acrónimo que debemos agregar a nuestro diccionario de la moda: el LWD.

Cecile Bahnsen F/W 24-25.

Alberta Ferreti S/S 2024.

Bevza S/S 2024.

Alexander McQueen F/W 24-25.

¿Qué es el LWD?

Comencemos por sus siglas: Long White Dress. Es decir, vestido blanco largo. Sin embargo, no se trata de cualquier vestido blanco. No es ibicenco, ni tampoco tiene aires nupciales, pero sí se trata de uno de esos vestidos bonitos y frescos que llevaremos con o sin medias. Visto en las pasarelas Primavera-Verano de Alberta Ferretti, Bevza, Altuzarra y más firmas, queda claro que este vestido ha llegado para convertirse en parte del nuevo fondo de armario. Es más, ver cómo su concepto se trasladaba a las colecciones otoño-invierno como hicieron Cecile Bahnsen, Alexander McQueen y otros implica darse cuenta de que el vestido blanco largo reinará todo el 2024 y no sólo en la primavera. Y tiene una radiografía bastante fácil de seguir:

• Es minimalista.
• Es fluido.
• No se pega y no marca nada que no queramos.
• De preferencia, va sin mangas.
• Es un poco pijo, pero con un toque moderno (así como el nuevo favorito de Zoë Kravitz)
• Se podría considerar como sinónimo del lujo silencioso, pero lo cierto es que tiene la capacidad de adaptarse a cada armario.

Así vamos a combinar el vestido blanco y largo más tendencia:

· LOOK #1. El moderno y elegante →

¿Qué necesitas?

• Una accesorio inesperado, como unos guantes largos.
• Las medias rojas más tendencia del momento.
• Los zapatos con kitten heel más vistos de la primavera.

· LOOK #2. Con contrastes →

¿Qué necesitas?

• La chaqueta de piel que más veces llevas.
• Un bolso a juego de diseño estructurado.
• Tus botas altas preferidas.

· LOOK #3. Perfecto para el entretiempo →

¿Qué necesitas?

• Tu gabardina de cabecera.
• Los zapatos de tacón más cómodos de tu zapatero.
• Un bolsito cruzado y súper práctico.

· LOOK #4. El de las nórdicas →

¿Qué necesitas?

• La americana más oversized de tu armario.
• Un pañuelo a juego perfectamente desacomodado sobre el cabello.
• Un par de calcetines largos.
• Los zuecos más cómodos y tendencia.

· LOOK #5. En clave monocromática →

¿Qué necesitas?

• El vestido blanco de tu elección.
• Unos calcetines blancos de aires deportivos.
• Las zapatillas blancas de estética retro y un poco tochos.

· LOOK #6. El más casual →

¿Qué necesitas?

• La camiseta de tu equipo deportivo preferido (para hacer de tu vestido la falda más bonita).
• Un bolso de tamaño medio.
• Las sandalias planas y de tiras que llevas cada verano.

Ya con la teoría bien aprendida, es momento de desempolvar ese vestido blanco largo que, seguramente, tienes en el armario. Y es que, lo prometemos, no necesitarás nada más para convertirte en la chica más elegante y con más rollo de la Primavera-Verano 2024 que ese vestido.

SUSCRÍBETE AQUÍ a nuestra newsletter para recibir todas las novedades de Glamour.

Los vestidos que serán tendencia esta primavera-verano 2024

Perteneciente a la colección de **Altuzarra** primavera-verano 2024, esta silueta abombada que en su día popularizó Cristobal Balenciaga regresará esta primavera con más volumen y más movimiento.

De los recatadas propuestas de **Jill Sander**, pasando por el boho de **Alberta Ferreti** o los modelos cortos y atrevidos de **Aigner**, el color más claro del espectro tomará la delantera con mucha fuerza.

Desde ahora pedimos perdón al color rojo. Y es que, aunque sí se seguirá llevando la siguiente temporada, lo cierto es que después de ver prendas teñidas de este azul tan vibrante y fresco en las pasarelas de **Acne Studios**, **Loewe**, **The Row e** **Issey Miyake** no no hay ganas de llevar otro color.

Si cierras los ojos e imaginas una estatua griega clásica, la imagen en tu mente probablemente involucre una figura con un trozo de tela envuelto y recogido sobre su cuerpo. Esta es la inspiración detrás de algunos de los vestidos más bellos de la primavera. Vistos en las colecciones de **Di Petsa** (con un toque mas moderno) o **Loewe**, estos vestidos presentan el mismo tipo de drapeado con micropliegues que resaltan el material fruncido.

Según **Coperni**, **Gucci** y **Ulla Johnson**, los vestidos lenceros se están renovando con importantes adornos de encaje para darles un toque más sensual que es ideal para usarlos más allá del dormitorio. De hecho, solo piden salir por la noche.

Ya estamos altamente enamoradas de las faldas y pantalones metalizados, así que por qué no añadir una prenda más. Es más, esta tendencia se ha encargado de poner de acuerdo a firmas tan diferentes como **Chloé**, **Diesel**, **Carolina Herrera** o **Courrèges**.

Esta temporada no marca el final de los dobladillos maxi tal y como los conocemos, pero **Christian Siriano**, **Marni**, **Versace** y muchas firmas más nos han dejado claro que esos vestidos que quedan por encima de la mitad de los muslos regresarán con la misma fuerza que lo hicieron en los 2000.

Las amantes de minimalismo se alegrarán (y mucho) de saber que el *look* de los años 90 se quedará con nosotras, ya que firmas como **16Arlington, Helmut Lang y Courrèges** han recurrido a los archivos de esta década para reivindicar su estilo más depurado y a muy a tono con [el lujo silencioso](https://www.glamour.es/galerias/que-es-el-lujo-silencioso-tendencia) que no para de crecer.

Las cosas como son, pensar en la primavera-verano nos hace pensar en los vestidos más frescos y no hay duda de que los tonos más claros de nuestros colores preferidos son ideales para los días más calurosos del año y firmas como **Fendi**, **Carolina Herrera**, **Del Core** y más están de acuerdo.

De pies a cabeza como en **Bottega Veneta**, a detalles mínimos como en **Acne Studios** o hileras que dan sensación de movimiento como en **Rabanne,** o bajos cargados de ellas como en **Chloé.** Este detalle que vuelve de los 2000 será nuestro mejor aliado para bodas y eventos especiales.

Hablar de [detalles florales](https://www.glamour.es/articulos/corsagecore-tendencia-flores-primavera) nos lleva a pensar en Miranda Priestly y su icónica frase: “¿Flores? ¿En primavera? Qué original”. Sin embargo, esta primavera-verano 2024 llegan de una forma renovada: en su máxima expresión como hizo **Alexander McQueen,** en detalles más pequeños como en **Simone Rocha** o **Willy Chavarria,** o en estampados como en Marni siempre serán una gran idea.

Mitad años 50, mitad evolución del guardainfantes –ese armazón de madera con aros de metal o de mimbre que se generalizó en las cortes españolas y que retrató Diego de Velázquez en *Las Meninas*–, estos vestidos llegan con un **volumen muy focalizado en las caderas**, mientras que la parte delantera y posterior se aplana casi por completo. Son el nuevo vestido perfecto de alfombra roja.

Sí, es cierto que [los vestidos transparentes](https://www.glamour.es/articulos/como-llevar-vestidos-pantalones-transparentes) no son nada nuevo, pero colecciones de primavera 2024 como las de **3.1 Phillip Lim**, **Issey Miyake y** **Saint Laurent** se han centrado en estos modelos que lo dejan todo a la vista con un efecto innegablemente fresco. Con las capas de tul transparente y organza como principales protagonistas, esta temporada será el momento perfecto para atreverse con las transparencias.

Esto te interesa: