La paradoja de la compraventa de viviendas: salvará el examen de 2023 pese a las caídas constantes

Las compraventas de viviendas inscritas disminuyeron un 15,1% interanual en noviembre, por encima del nivel de moderación conseguido el mes anterior. Con este dato que publica hoy el Instituto Nacional de Estadística (INE) se confirman 10 meses de caídas en la estadística, de los que la mitad (los cinco últimos) se miden a doble dígito coincidiendo con la tensión económica generada por la inflación. Con todo, el sector prevé que el número de operaciones cerradas salvará el año y hará de él el segundo mejor desde 2007,en plena burbuja inmobiliaria.

La paradoja de la compraventa de viviendas: salvará el examen de 2023 pese a las caídas constantes

Según los datos de la estadística de Transmisiones de Derechos de la Propiedad publicada este viernes indican que en el mes se cerraron 46.888 operaciones. La compraventa de vivienda nueva se redujo un 11,1% y se materializó en 8.873 operaciones (es su tercer mes por debajo de las 9.000) pero fue la de segunda mano la que anotó la mayor caída (-16%) con 38.015 operaciones.

¿Cómo puede acabar siendo un buen año para la vivienda si no deja de caer? Para explicar esta paradoja hay que hacer un repaso del sector en los último tiempos y lo primero sería recordar que 2022 fue un año récord para la compraventa tras el letargo pandémico. Toda comparación relativa será negativa al compararla con ese ‘boom’. Sin embargo, si se atiende al volumen de operaciones cerradas, el inmobiliario muestra un vigor similar al de antes del covid.

El dato de octubre confirmó que se habían superado las 500.000 operaciones. Si la tendencia se mantiene en diciembre, el sector no descarta incluso cerrar el mejor año en número de operaciones desde 2207.