La dupla ganadora del cine peruano

La dupla ganadora del cine peruano

Por Sandro Mairata

“Esto es un milagro, es bellísimo, es un sentimiento increíble, o sea, pucha… viva el Perú y viva el cine”, me decía una emocionada Klaudia Reynicke el sábado 24 de febrero desde Alemania, a poco de haber obtenido el Gran Premio del Jurado en la sección Generation del Festival de Cine de Berlín 2024, el evento popularmente conocido como Berlinale. Lo decía a poco de haber extraviado por un momento, entre el gentío del festival, a Abril Gjurinovic, la joven coprotagonista de su película Reinas, junto a Luana Vega, un filme que el público peruano aún no ha visto pero que ya celebramos.

Antes, en la noche inaugural, Reynicke se había tomado y luego colgado en sus redes una foto con el maestro Wim Wenders detrás de ella, y con el elenco en pleno de Reinas en la alfombra roja. Luego del estreno y los aplausos –con ovación incluida–, la Berlinale había acabado para ella. Jimena Lindo, coprotagonista, estaba en la playa en Lima. Gonzalo Medina también había regresado al Perú.

“Volví a Suiza, a mi vida real, el miércoles”, explica. “Ya estaba pensando en otras cosas, estaba pensando en el colegio de mis chicos. Mi mente no estaba en esto ya. En (el Festival de) Sundance tuvimos éxito, pero no ganamos premios, es normal no ganar premios. Cuando me llega este correo el jueves por la noche y me hablaban de un premio, yo no lo podía creer. Me decían que debía volver a Berlín de inmediato. Yo vivo en un lugar lejos de la gran ciudad, tenía que buscar aeropuerto. Y encima me decían que no podía decirle nada a nadie del premio”. Lindo y Medina sospecharon cuando Reynicke volvió a Berlín, pero la directora no podía confirmarles nada hasta solo unas horas antes de recibir la distinción.

Allí, en la sede de la Berlinale, había permanecido nuestro otro director premiado, el cusqueño Franco García Becerra, cuya cinta Raíz (presentada como Through Rocks and Clouds) obtuvo el Premio del Jurado en la misma sección Generation. “Desde un primer momento, el plan había sido quedarnos toda la semana del festival”, cuenta en Lima, con su diploma enmarcado y guardado en una bolsa roja del festival, mientras conversamos en un Starbucks. Durante los días de Berlinale, ni Reynicke ni García pudieron coincidir, y fue solo en la ceremonia de premiación cuando ambos equipos se vieron. Los premios de ambos son los más importantes del cine peruano reciente, que se suman al premio a mejor película obtenido en noviembre pasado por otro cusqueño, Marco Panatonic, por Kinra, en el Festival de Cine de Mar del Plata.

El encuentro motivó las fotos para el recuerdo, pero hubo una que dio muchas vueltas en las redes: la de los niños Alberth Merma (protagonista de Raíz) junto a Abril Gjurinovic, sonrientes uno a lado del otro. Él, un niño andino de chullo y tez cobriza, junto a una niña de cabello rubio cenizo y tez blanca, capitalina. “Increíble, qué maravillosa foto”, dice Reynicke. “Esa foto de ellos dos allí es muy fuerte. Es como un milagro, esto es muy bueno. Y más feliz de tener a otra película peruana premiada, cuando salió premiada Raíz creo que salí gritando más que todos”.

Reynicke (Lima, 1976) se inspiró en cintas peruanas como el documental Metal y melancolía (1993) de la peruano-holandesa Heddy Honnigman para presentar la historia de una madre limeña (Lindo) que debe dejar el país con sus dos hijas (Vega y Gjurinovic) tras el autogolpe fujimorista de 1992, pero antes les hará pasar un tiempo con el padre ausente de ambas, interpretado por Molina. Filmada con elegancia y –citando a Honnigman– melancolía, la historia es un delicado estudio de las relaciones familiares que beben de la nostalgia de Reynicke por el Perú que dejó.

Klaudia Reynicke con su diploma en Berlín. Foto: difusión

Camino a las salas

“Imagínate qué significan estos premios para Perú, para el cine, para la cultura, es lo mejor que nos puede pasar”, dice Reynicke. “Y son películas tan diferentes. O sea, yo no he visto Raíz, pero de lo que leo, lo que escucho, es la diversidad del Perú. Mejor de lo que ha pasado no ha podido ser”.

Reynicke y García Becerra (Cusco, 1977) han sido unidos por la providencia en una nueva respuesta granítica, incontestable, a los sectores políticos peruanos que buscan quitarle recursos al cine peruano con proyectos como el de la Ley Tudela. Ambos filmes se hicieron con estímulos estatales que tampoco fueron suficientes: Reinas es una coproducción española-peruano-suiza, y Raíz recibió diversos fondos y terminó siendo una coproducción chileno-peruana.

García Becerra tiene mucho para contar de la odisea para hacer solo una película. Formado como antropólogo en el Cusco, le fue ganando la antropología visual “me dediqué mucho a la fotografía” y esto le llevó a “dejarlo todo” y empezar a acumular cursos, talleres, un año de estudios de cine en Lima y hacerse una carrera como director de videos musicales, institucionales y a ocupar diversos roles técnicos en filmes peruanos. El proyecto de Raíz fue ganando premios de guion y luego en sus diversas etapas fue creciendo en competencias en Chile, donde un contacto en común se animó a ingresar como socio del proyecto para sacarlo adelante.

“Lo que queríamos contar tenía una exigencia técnica”, explica el director. “Y para eso necesitas invertir en el mejor equipo posible. A varios los traje de mi filme anterior, Vientos del sur (2018)”. Aunque se resiste a hablar de “referentes”, admite que le gusta el estilo cáustico de directoras contemporáneas como Chloé Zhao en Nomadland y algo de eso se impregnó el filme “aunque no estaba pensando en ello, fue algo más inconsciente”.

Ambas cintas pasarán una ruta de festivales antes de llegar a salas peruanas, que también esperan a Kinra. Sobre Raíz, García Becerra se ríe cada vez que se ve forzado a usar la palabra “orgánico”, ese término deformado por la cosas del internet. La palabreja aflora una y otra vez con lo que quiere decir: “Nosotros ganamos unos fondos de Cine del Mañana como proyecto en el Festival de Cine de Lima, hemos estado ahí. Lo orgánico sería estrenar ahí, ojalá. Y luego vendría el estreno comercial. Eso es otro plan”.