‘Faro’: el refugio mágico de Hugo Silva

“Un faro es un lugar mágico, donde todo puede pasar”. Son las palabras que dice Irene Montalà en Faro (estreno en cines 26 de enero). Le transmite a su hija la energía y excepcionalidad de estos lugares que a todos nos atraen. Y es exactamente lo que piensa la directora y guionista Ángeles Hernández y la razón por la que giró toda la historia alrededor de uno.

“Quería rodar un drama intimista, me apetecía que fuera una película de género y tenía un punto de partida: la historia de un padre (Hugo Silva) y de una hija (Zoe Arnao) que viven una tragedia y buscan un lugar donde refugiarse”, nos cuenta. “Pensando dónde podíamos ubicar esa historia, surgió la idea del faro por su dicotomía: un faro está diseñado para salvarte la vida, pero a la vez están situados en lugares muy rocosos, aislados, de difícil acceso y que casi dan yuyu”.

Y, en seguida, al pensar en faros le vino uno a la cabeza: el faro de Favaritx, en Menorca. “Es uno de mis lugares favoritos del mundo”, reconoce.

Carretera de Sa Calobra.

Desde el proceso de escritura tuvo ese faro en mente y también las playas y los pueblos de Menorca y Mallorca, se imaginaba su historia de género, que se mueve entre lo onírico y lo sobrenatural, entre el thriller y el drama íntimo, en un espacio que fuera totalmente opuesto a su tono. “Son lugares paradisiacos en los que a priori no parece que vaya a pasar nada malo… El hecho de ubicar una peli de terror en espacios tan lumínicamente brillantes sorprende… pero donde hay luz, hay sombras”, confirma.

La película arranca explotando la belleza mediterránea alrededor de Baleares, la familia protagonista está empezando unas vacaciones en su velero. El padre se ausenta un momento para una última gestión y deja a madre e hija solas, en un accidente la madre muere. El trauma con el que se queda la hija, el duelo que tienen que pasar los lleva a refugiarse en ese antiguo faro familiar en la época de otoño-invierno. En el pueblo desierto, los vecinos miran con recelo ese faro: “El principal objetivo de un faro es avisar del peligro: este no lo hace”, le dicen en el supermercado.

Hugo Silva, ‘Faro’.

Poco a poco ese misterio intrínseco que rodea a esas torres con luz se cierne sobre padre e hija. “Simboliza la esperanza de que este padre e hija se puedan reencontrar y reconciliar de la culpa que tienen ambos en este proceso de duelo”, cuenta Hernández. “Que la historia sucediera en el faro me dejaba jugar mucho con la estética. Entre la línea onírica y real”.

UNA ISLA FICTICIA

Aunque queda claro pronto que estamos en una isla del Mediterráneo y, probablemente, en alguna de las Baleares. En ningún momento, se especifica en cuál estamos. A qué pueblo se dirigen, a qué playas, cuevas o faro.

En Coves dels Hams.

Esta isla ficticia es, en realidad, un puzle de localizaciones naturales rodadas entre Menorca y Mallorca.

En la mayor de las Islas Baleares rodaron en la muy reconocible y cinematográfica carretera de Sa Calobra, como si fuera el sinuoso camino hasta el faro protagonista. Rodaron en Sa Illeta, en Cala Tuent, en Port de Sóller y también allí situaron las cuevas que tienen un papel relevante en la película. Coves del Drach (y nos acordamos de El verdugo), Coves dels Hams y la Cova des Vell Marí.

Los atardeceres baleares.

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En Menorca, además de encontrar la localización principal, el Faro de Favaritx, filmaron en Es Grau, que sería el pueblo, estuvieron por el Parc Natural de S’Albufera des Grau, en Port de Sanitja, en Cantera de Lithica y en Cales Coves.

“Todas las localizaciones naturales donde rodamos le dan una personalidad brutal a la película”, dice Hernández. “Se convierten en algo fundamental porque es una película en la que se verbaliza muy poco, y entonces los paisajes son estados de ánimo de por sí, y ayudan mucho a vivir ese proceso de duelo de los protagonistas”.

Faro de Favaritx.

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