Cada vez que hablo con mis amigas solteras sobre citas, el único consejo que les doy es: siempre acepta salir con alguien al menos una vez, aunque parezca que no te gusten a primera vista. La persona con la que salgas tal vez no sea la indicada, pero puede ser que a través de ella la conozcas, como me pasó a mí.
Me rompieron el corazón en París
¿No es un privilegio decir que me rompieron el corazón en París?
Si alguien me hubiera dicho cuando caminé la Rue Sebastopol por primera vez a los 18 años que una década después estaría llorando un gran amor entre las calles de París, no hubiera podido creer mi suerte.
La historia comienza a principio de los 2000 en Nueva York, que no es la ciudad más fácil para conocer al amor de tu vida. En esa época, yo estaba trabajando en la revista Elle y vivía con tres amigas entre la calle 19 y la 5.ª, es un lof fabuloso, tal vez demasiado fabuloso como para que nosotras viviéramos ahí. Yo le pedí a mi amiga Ruth que me acompañara a una fiesta a la que mi compañera Ana María me había invitado en uno de esos clubs nocturnos nuevos de Manhattan. Fue una noche muy divertida y cuando terminó, mi amiga Ruth (quien no quería ir a la fiesta), conoció a su novio. Lo llamaremos Carlos, por motivos de privacidad, y años después se terminó convirtiendo en su esposo. Ellos llevaban un año de novios, cuando yo conocí a Nick, quien en esa época me llevaba cinco años. Era la primera vez que salía con alguien que me llevara tantos años, pero como él era muy exitoso, espontáneo y tenía un encanto especial, me la estaba pasando muy bien.
Digamos que era esta una relación típica neoyorkina, nos veíamos después de un día largo de trabajo, salíamos hasta tarde y después pasábamos el fin de semana de fiesta, seguido de un brunch los domingos. Pero no teníamos ningún compromiso formal. Sin embargo, así conocí a Fiona, una amiga suya que pronto se convirtió en mi amiga. Otra clásica historia neoyorkina de cómo se hacen amistades. A pesar de que Nick y yo pasábamos mucho tiempo juntos, lo que empezó después del maratón de Nueva York en noviembre, se acabó en febrero, después de que Nick me dijo que se iba de la ciudad y que no quería seguir con una relación a distancia. Por un tiempo, seguimos hablando, pero básicamente la relación siguió bajo sus términos. Yo tenía el corazón roto y las cosas solamente empeoraron cuando mi papá falleció en abril del 2003 de un aneurisma de aorta. Sobra decir que ese fue mi periodo más triste. Por meses, tuve un hoyo en el estómago.
Fue durante ese tiempo que comencé a trabajar en Vogue y me centré en el trabajo. Mis amigos me apoyaron mucho durante esa época y una de ellas, Fiona, me invitó a salir por cócteles con sus compañeros del MBA Sebastien y Alexis. Como suele suceder en Nueva York, Fiona se mudó de nuevo a Londres, pero Sebastien y yo nos hicimos cercanos y empezamos a salir solamente como amigos.
Soltería
Llevo diez años soltera y te digo por qué que ha sido la mejor decisión de mi vida
Porque todo lo que he aprendido en el camino sobre el amor no se parece a lo que me han mostrado en las películas.
En junio de 2003, Sebastien y yo fuimos a cenar al East Village y luego nos encontramos con dos de sus compañeros de trabajo en el restaurante The Elephant. Uno de los amigos que conocimos esa noche, era Francisco, con quien me casé en 2012. No conectamos de inmediato, pero yo había invitado una amiga de Vogue, que estaba saliendo con un amigo mexicano (que yo le presenté) y resultó que estudió con mi esposo en Ciudad de México. Nos juntamos todos cuando terminó el verano en un club nocturno (otra vez) y esa fue la segunda vez que conocí a Francisco, nos tomamos algo juntos y platicamos un poco. Después de un par de años algo tumultuosos, empezamos a salir oficialmente y ocho años después nos casamos y once años después tuvimos dos hijas.
La moraleja de la historia, como yo lo veo, es que estamos aquí para conectar y a través de la conexión hacemos amigos. Muchas veces esos amigos se pueden convertir en parejas, muchas veces no. Si yo no hubiera salido esa noche con Ana María en octubre de 2001, mi amiga Ruth no hubiera conocido a su esposo y yo no hubiera conocido a su Nick. Tal vez yo si hubiera conocido a Francisco a través de alguien más, nunca lo sabré. Lo que sí sé, es que por más que me arrepienta de haber dejado que Nick saliera y entrara de mi vida casi un año, cuando estaba en mi punto más vulnerable, estoy agradecida de que gracias a él conocí a tres grandes amigos y conocí al amor de mi vida, Francisco.
Por el 2014, Carlos, quien ahora es el exesposo de mi amiga Ruth, me dijo que tuvo una cena con Nick, quien le preguntó “que si yo aún le guardaba rencor” y le dije, “no, al contrario. Dile que muchas gracias porque por él conocí a Francisco, tuve dos hijas y la vida que siempre soñé tener”.
News Related-
Jugadoras muestran su amor previo a enfrentarse en Final de Liga MX Femenil
-
“Quiere ser blanca”: critican a Beyoncé por su aspecto durante estreno de “Renaissance’
-
Vicente Fox cierra su cuenta de Twitter tras acusaciones de misoginia
-
Nicola Porcella causa polémica par dar un “ride” al Metrobús a sus fans
-
Rayados: Héctor Moreno 'enciende' a la afición tras renovar con Monterrey
-
X es "un arma de destrucción masiva de nuestras democracias", alcaldesa de París
-
Abejas de León pierde ante Fuerza Regia que suma su tercer juego ganado
-
Javier Milei se reúne en Nueva York con el expresidente Bill Clinton y un asesor de Biden
-
Entre acusaciones, dirigentes nacionales de PAN, PRD y MC se confrontaron en debate en la FIL
-
¿Por qué NO todos los trabajadores tendrían 2 DÍAS de DESCANSO con la Reforma Laboral? LFT
-
Los personajes más odiados de todos los tiempos en las series: 'Game of Thrones' aparece tres veces entre los 10 más votados
-
Gobierno de AMLO pagará 2 mil millones de pesos a Liverpool por la bodega para la "superfarmacia"
-
¿Qué usó Anika Rodríguez en la cara durante la final femenil?
-
“Riesgo de una catástrofe nuclear es real y va en aumento”, alerta Juan Ramón de la Fuente en la ONU