Prueba SsangYong Tivoli: un SUV cómodo, práctico y funcional

Prueba SsangYong Tivoli: un SUV cómodo, práctico y funcional

Casi nueve años después de su debut internacional en el Salón Internacional del Automóvil de Ginebra en marzo de 2015, y tras un restyling en 2019 con cambio de motorizaciones, SsangYong actualiza los Tívoli y Tívoli Grand. Básicamente son el mismo coche y lo único que cambia es el tamaño. 4,22 metros el primero y 4,48 el segundo. El maletero tiene una capacidad de 427 o 720 litros respectivamente.

SsangYong Tivoli: un SUV muy polivalente

Tiene formas muy regulares y si se aprovecha hasta el techo la capacidad es significativa, aunque la boca de carga está muy elevada y la boca es más estrecha en la parte central. Pero no hay duda de que estamos ante un espacio de carga generoso y práctico en líneas generales. A esto último contribuyen detalles a destacar como los ganchos para colgar bolsas, las mallas laterales para fijar bultos sueltos o la alfombra de goma anti deslizante que equipaba nuestra unidad de pruebas, fácil de desmontar y lavable.

Ambas versiones han modificado también su estética con respecto a las versiones anteriores. Destaca el nuevo frontal, donde desaparece el logo de la marca en favor de la denominación del modelo, Tivoli. También la parrilla y faros están rediseñados. El lateral y trasera también cambian, aunque con modificaciones más livianas.

Ambos están disponibles con un solo motor de gasolina turbo de inyección directa 1.5 GDI (Gasoline Direct Injection) con dos niveles de potencia, 135 y 163 CV. Las cajas de cambios son siempre de seis velocidades, manual o automática, y la tracción es delantera. Este motor turbo de gasolina tiene un par máximo es de 280 Nm entre 1.500 a 4.000 rpm (con transmisión manual) y de 260 Nm de 1.500 a 4.000 rpm (con cambio automático).

Algunas características destacadas son una dirección asistida eléctrica Flex Steer, que cuenta con un sistema de desconexión del motor eléctrico cuando el conductor no actúa sobre ella, una forma de conseguir un consumo más contenido. Además, ofrece al conductor la posibilidad de ajustar el tacto y dureza en tres niveles: Comfort, Normal y Sport.

Ficha técnica del SsangYong Tivoli – Tivoli Grand

• Largo (m): 4,22 – 4,48
• Ancho (m): 1,81
• Alto (m): 1,61 – 1,66
• Batalla (m): 2,60
• Maletero (l): 427 – 720
• Peso (kg): 1.330
• Motor (cc): Gasolina 1.5
• Potencia (CV): 135- 163
• Par máximo (Nm): 280 Nm
• Caja de cambios: Manual o Automática 6 vel. Velocidad máxima (km/h): 181
• Aceleración 0 a 100 km/h (sg): N.D.
• Consumo medio (l/100 km): 6,51 – 6,72
• Emisiones C02 (g/km): 150 – 163
• Etiqueta DGT: C
• Precio (euros): Desde 14.600

El primero es el más suave, enfocado para facilitar las maniobras y giros cerrados típicos que se producen en conducción urbana. En el extremo opuesto está el Sport, que proporciona un tacto más firme, que busca mejorar el manejo en conducción deportiva, mientras que el Normal ofrece un tacto intermedio. Lo cierto es que las diferencias son apreciables.

Por lo que respecta a la suspensión, se conserva el esquema McPherson en el tren delantero y un eje de torsión detrás, un sistema compacto y fiable que proporciona suavidad y estabilidad y que se compenetra con una carrocería construida con un 79% de acero de alta resistencia (HSS), mientras que en el Tívoli Grand este porcentaje es del 71,1%.

Test de conducción con el Ssanyong Tivoli

En materia de seguridad el Ssanyong cuenta con seis airbags en los acabados Line y Urban Plus, que se combinan con un Sistema de Seguridad de Retención y un completo set de ayudas a la conducción ADAS entre las que destacan ABS con repartidor de frenada EBD, ayuda a la frenada de emergencia BAS, sistema ESS de aviso luminoso a través de las luces de emergencia en caso de producirse una deceleración brusca, control dinámico de estabilidad ESP unido al control de tracción TCS, sistema de mitigación del vuelco ARP, sistema de ayuda al arranque en cuesta HSA, control de descenso en pendientes HDC y monitorización de la presión de neumáticos TPMS, que alerta al conductor de cualquier cambio en la presión de los neumáticos.

Al volante el Tivoli es sobre todo un coche cómodo. El motor tiene un tacto agradble, si bien es necesario mantener un régimen de giro adecuado para aprovechar la potencia disponible. La forma de hacerlo es jugando con el cambio de marchas, que aunque la palanca tiene un recorrido largo, no plantea problemas en este sentido.

Por cierto, este motor se puede adaptar a gas –GLP– por solo 2.750 euros, una forma de ahorrar y de conseguir la etiqueta ECO de la DGT. Eso sí, se pierde capacidad en el maletero, pues es donde se ubica el depósito circular del GLP.

Por lo demás, el Tivoli ofrece un comportamiento general agradable. Es un coche manejable en ciudad y correcto en carretera, si bien la suspensión prima el confort de marcha, por lo que si se fuerza el ritmo aparecen algunos rebotes en la suspensión y movimientos de la carrocería. Su dirección de asistencia eléctrica es ligera aunque menos comunicativa de lo que nos gustaría.

Hay que tener claro que el Tivoli es sobre todo un SUV familiar, polivalente y sin pretensiones deportivas. Por eso si no se fuerza el ritmo el coche resulta muy noble de reacciones y es posible recorren muchos kilómetros con un alto nivel de confort.

A favor: Habitabilidad, capacidad maletero, motor

En contra: Cambio automático, tacto suspensión,