La invitada que fue en sandalias de tacón mini y cuadrado a la boda más elegante de Madrid

Las sandalias de tacón mini se introdujeron en el libro de estilo de las invitadas elegantes sin hacer ruido pero con mucha determinación. Solo así han conseguido lo que pocas prendas y accesorios consiguen, convertirse en una suerte de básico al que, ante la duda, siempre se recurre porque resulta imposible fallar. Ya lo dijo la experta en boda Cristina Ruiz Montesinos (Casilda se casa): no importa el número de bodas que tengas este año, y que seguro que tal y como está la industria nupcial superan las seis, mientras cuentes con unas sandalias beis, otras negras y par de bolsos de mano (ah, y una capa o chaqueta elegante), tienen el entuerto más que resuelto. Andrea Mateache (fundadora y diseñadora de Matelier) apoya la moción y concluye con un clásico: “es un día en el que tienes que estar cómoda y segura”. Y punto.

Podría decirse que el 90% de las invitadas ha entendido el asunto, no obstante se han desterrado tantos elementos incómodos de la ecuación que solo cabe concluir que o bien por el elevado número de bodas que se tiene o por el cambio de dirección de las tendencias, ya no hay razón para sufrir sobre unos elevados tacones o apenas poder comer o sentarse por lo ajustado de la tela del vestido. Y cada fin de semana se celebra un nuevo enlace que apoya esta teoría.

Dos de los invitados a la boda de Teresa Revuelta y Miguel Fierro Corsini. © GtresOnline.

La boda de Teresa Revuelta y Miguel Fierro Corsini celebrada el pasado fin de semana en Madrid ha sido el último marco que ha acogido a numerosas invitadas elegantes, naturales y, sobre todo, muy cómodas. Ha habido excepciones, por supuesto, como siempre las hay, pero son las menos al lado de tantos vestidos de telas sedosas y confortables y tantas sandalias que invitan a bailar por lo cómodo de su propuesta. En cuanto a estas últimas, tenemos un par favorito: un modelo de color rosa bebé con dos tiras sobre el empeine y un precioso tacón cuadrado a prueba de dolores a cualquier hora de la madrugada. Y lo ha llevado una de esas invitadas que sin duda han priorizado la comodidad, que nunca está reñida con la elegancia, o al menos esos dice en los tiempos que corren y en las bodas de la primavera 2024.