La bebida que se consume en el desayuno e incrementa el riesgo de padecer cáncer
La mayoría de las enfermedades pueden prevenirse, tratarse o inclusive darse dependiendo de la alimentación que se tenga. Si esta es balanceada y rica en nutrientes, descartando productos altamente procesados, seguramente su salud estará en óptimas condiciones y el cuerpo tendrá las vitaminas y minerales que necesita. De lo contrario, el riesgo de padecer de ciertos males, aumentará.
“Llevar una dieta sana a lo largo de la vida ayuda a prevenir la malnutrición en todas sus formas, así como diferentes enfermedades no transmisibles y trastornos. Sin embargo, el aumento de la producción de alimentos procesados, la rápida urbanización y el cambio en los estilos de vida han dado lugar a un cambio en los hábitos alimentarios. Actualmente, las personas consumen más alimentos hipercalóricos, grasas, azúcares libres y sal/sodio; por otra parte, muchas personas no comen suficientes frutas, verduras y fibra dietética, como por ejemplo cereales integrales”, según describe la Organización Mundial de la Salud.
Aunque la leche ha sido ampliamente recomendada por su riqueza en calcio, debe evitarse el consumo excesivo.
El cáncer es una de esas enfermedades que se advierten en lo dicho anteriormente por la entidad internacional. De acuerdo al portal de la American Cancer Society, “el 18 % de los casos de cáncer y el 16% de las muertes por cáncer se pueden asociar a una combinación de una alimentación mala”.
Y es que ni siquiera es necesario pensar en los productos artificiales o en los alimentos químicamente procesados para la aparición del cáncer, sino que algunos sumamente comunes y de gran consumo que pueden tener el mismo efecto.
Este es el caso de la leche. Si bien muchos médicos y autoridades internacionales insisten en su riqueza de calcio, investigadores de la Universidad de Harvard, en Estados Unidos, ponen en tela de juicio su papel como la principal fuente de tal nutriente, abogando que otros productos naturales pueden sustituirla sin problema.
Además, el mismo estudio de la universidad norteamericana sugiere que el alto consumo puede aumentar el riesgo de padecer cáncer de próstata y de ovario. Asimismo, los científicos en cuestión han determinado que la ingesta diaria de productos lácteos incrementa los niveles de grasas saturadas y de vitamina A, lo que hace que los huesos pierdan fuerza.
La leche ha sido criticada recientemente por investigadores de Harvard.
OMS busca acabar con “tácticas insidiosas” para promover la leche de fórmula para niños, ¿por qué?
Entre el 20 y el 22 de junio, la Organización Mundial de la Salud (OMS) y el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) vienen presidiendo un congreso internacional cuyo tema principal es socializar la comercialización de productos alternativos a la leche materna. El evento se está llevando a cabo en la ciudad de Ginebra, Suiza, y contará con la participación de delegados de cerca de 130 países.
De acuerdo con un comunicado de prensa de la OMS, estos representantes “discutirán y compartirán conocimientos y estrategias para poner fin a la comercialización poco ética de sucedáneos de la leche materna”.
Asimismo, advirtió que el marco normativo que se está discutiendo fue aprobado por la Asamblea Mundial de la Salud (AMS) en 1981 y se conoce como Código Internacional de Comercialización de Sucedáneos de la Leche Materna.
“Cuarenta y dos años después, las empresas elaboradoras de fórmulas lácteas continúan violando estos principios establecidos y anteponen los intereses comerciales a la salud de los niños y las familias. Resoluciones posteriores de la AMS han pedido repetidamente a los gobiernos nacionales que promulguen, supervisen y hagan cumplir las disposiciones del Código”, advirtió la OMS en su comunicado.
La venta de leche de fórmula está siendo supervisada al detalle por la OMS.
A su vez, consideró como “inadecuada” la respuesta que han hecho los países frente a los llamados de distintas organizaciones multilaterales para ejecutar acciones que favorezcan la lactancia materna. Por ello, el organismo sanitario consideró que se requieren regulaciones gubernamentales mucho más estrictas.
“Más del 70 % de los Estados miembros ha promulgado leyes que ponen en práctica al menos algunas de las disposiciones del Código”, aseguró Francesco Branca, quien funge como director de Nutrición y Seguridad Alimentaria de la OMS.