Karol G en Chile: despecho, locura y un show de tres horas que no dejó a nadie indiferente

ADN RADIO

Es una especie de terapia. El concierto de tres horas de Karol G en Chile, el primero de tres que agendó en el Estadio Nacional, es simplemente una oda a exorcizar todos los dolores de adentro.

Es que la colombiana pasa del baile a entonar hits donde el despecho y el desamor dan paso a una mujer empoderada y resuelta.

Una catarsis que es agradecida por el público, mayoritariamente femenino, y que la cantante va sazonando con frases que apuntan a salir adelante, no importa cuanto cueste, porque al final siempre sale el sol.

Una jornada donde 45 mil personas corearon todos sus éxitos, y donde todo parte como un relato, donde la sirena Carolina es feliz, luego su corazón se congela de pena y finalmente deja todo atrás, convertida en la celebrada Bichota.

Karol G y la devoción absoluta

Así, la intérprete se lanza a regalar parte de su discografía, con éxitos mundiales como TQG, Besties y después Tusa, donde el coliseo de Ñuñoa es un tremendo karaoke.

Sigue a esto la sensualidad absoluta de Mi Cama y X si Volvemos, donde la artista se mueve por el escenario meneando sus impactantes caderas.

Divertida, fresca y cercana, Carolina, su nombre real, interactúa con el público durante toda su performance, donde se emocionó de forma genuina al ver todo lo que sus fanáticos le prepararon: carteles y una fan action donde llenaron de corazones el recinto.

“Chile, fuiste vital para los primeros años de mi carrera”, dijo al borde de las lágrimas, para luego seguir con una presentación cuyo cuarto acto es lejos el mejor de la noche.

Es que ahí es donde las voces de los asistentes casi botaron el estadio, gritando temas como 200 copas y Mamiii, botando todo desengaño amoroso y terminando en una gran fiesta con Provenza como cierre.

Un show donde Karol G deja claro que es la mujer más importante de la música urbana mundial, y que se merece la devoción absoluta de sus fanátic@s, que se lucen con sus outfits inspirados en la Bichota y dejaron todo en la primera noche de la colombiana en Chile.