¿Existe algún riesgo de toxicidad en el habitáculo de un coche?

Ciertos materiales del interior del coche pueden tener efectos tóxicos.

El habitáculo de un coche es un espacio que tiene mucho peso a la hora de comprar un coche. La comodidad, el espacio y todos los extras que elevan estas dos primeras características influyen en la decisión del comprador. 

La calidad de los materiales es uno de los parámetros a los que muchos conductores dan importancia. Los fabricantes cada vez trabajan más con materiales reciclados y respetuosos con el medioambiente, además de incorporar acabados de muy alto nivel estético incluso en versiones de acceso. Sin embargo, ¿se ha analizado la posible toxicidad del habitáculo del coche?

Que no salten las alarmas. El habitáculo de un coche no es tóxico por sí mismo, ni solo de conducir se van a sufrir consecuencias graves para la salud. El problema reside en algunos de los materiales que están presentes en el interior del coche, como los plásticos, aunque estos no presentan efectos negativos a no ser que se expongan a condiciones extremas, como el calor. Para reducir riesgos, existen numerosas normativas que sobre los tipos de material y las calidades que se pueden utilizar en interiores, como la norma UNE 171330:2008.

Materiales tóxicos en el habitáculo

Algunos de los materiales que se utilizan en la fabricación de ciertos modelos de coche son poliuretano y plásticos, que pueden emitir gases cancerígenos con el tiempo. Por otro lado, puede existir la presencia de lo que se llaman compuestos orgánicos volátiles (COV). En estado gaseoso, estos compuestos los liberan varios materiales, como los plásticos.

Entre otros materiales tóxicos que se pueden encontrar en el habitáculo del coche, están, por lado, las sustancias retardantes de llama, con base de bromo, cloro y plomo. De todas formas, su presencia es casi inexistente ya que no deben estar en el habitáculo. Por otro lado, metales pesados, en estructuras y tejidos.

Aunque hay normas que intentan frenar el uso de materiales tóxicos, no existen regulaciones específicas ni pruebas para cada tipo de material y sus efectos. El agente más preocupante son los gases COV, cuya posible aparición no se calcula una vez que el material plástico ha salido de fábrica.

Los mejores consejos para limitar los efectos tóxicos dentro del habitáculo del coche son:

• Evitar aparcar al coche al sol o que la temperatura del interior alcance cifras muy elevadas. 
• Ventilar. 
• Limpiar regularmente el habitáculo. 
• Utilizar productos seguros y no tóxicos. 
• Revisar que los filtros del aire funcionan y están en buen estado.