Senadores autorizarían al gobierno a cerrar la frontera ante aumento de cruces de inmigrantes, según CNN

El muro fronterizo de Estados Unidos visto de desde Ciudad Juárez, en Chihuahua, México.

Los negociadores del Senado acordaron facultar al gobierno de Estados Unidos de la autoridad para cerrar la frontera si se requiere bajo ciertas condiciones y restringir así significativamente los cruces de inmigrantes indocumentados, según fuentes citadas por CNN.

El acuerdo del Senado, que se espera que se dé a conocer la próxima semana, también aceleraría el proceso de asilo para considerar los casos en un plazo de seis meses, en comparación con el sistema actual, según el cual los solicitantes de asilo podrían tardar hasta 10 años.

Los detalles del acuerdo que fueron dados a conocer por CNN el viernes, avanzan aspectos de las negociaciones que se han prolongado durante meses, mientras los líderes del Senado mantienen la esperanza de poder vincular el acuerdo sobre el control de la inmigración y la seguridad en la frontera a la ayuda a Ucrania, Israel y Taiwán, cuando se avecinan crisis internas e internacionales.

El acuerdo permitiría someter a la consideración del Congreso un proyecto de ley para aprobar el presupuesto de emergencia de $106,000 millones de dólares solicitados por el presidente Joe Biden en el mes de octubre.

El plan también ejercería presión sobre los legisladores republicanos de ambas cámaras que exigen duras restricciones migratorias, para que decidan si aprueban estas nuevas autoridades o rechazan el plan, ya que el expresidente Donald Trump ha instado al Partido Republicano a derrotar cualquier medida que no sea lo que él llama un proyecto de ley “perfecto”.

El presidente Joe Biden, en una inusual declaración sobre las negociaciones en curso en el Congreso, dijo que el acuerdo por el que han trabajado los negociadores del Senado es duro y justo.

“Lo que se ha negociado, si se convierte en ley, sería el conjunto de reformas más duras y justas para asegurar la frontera que jamás hayamos tenido en nuestro país”, dijo Biden el viernes. “Me daría, como presidente, una nueva autoridad de emergencia para cerrar la frontera cuando se vea abrumada. Y si me dieran esa autoridad, la usaría el día que firme el proyecto de ley”.

Según el paquete que se publicará próximamente, se otorgaría al Departamento de Seguridad Nacional una nueva autoridad de emergencia para cerrar la frontera si el promedio diario de encuentros con inmigrantes llega a 4,000 en un lapso de una semana.

Si los cruces de migrantes aumentan por encima de los 5,000 en promedio por día en una semana determinada, el DHS estaría obligado a cerrar la frontera a los inmigrantes indocumentados que la crucen y no ingresen por los puertos de entrada.

A ciertos inmigrantes se les permitiría quedarse si se demuestra que huyen de la tortura o la persecución en sus países.

Además, si los cruces superan los 8,500 en un solo día, el DHS estaría obligado a cerrar la frontera a todos los inmigrantes que cruzan ilegalmente la frontera. Según la propuesta, a cualquier migrante que intente cruzar la frontera dos veces mientras está cerrada se le prohibiría ingresar a Estados Unidos durante un año.

El objetivo del trío de negociadores compuesto por el senador republicano James Lankford de Oklahoma, la senadora independiente Kyrsten Sinema de Arizona y el senador demócrata Chris Murphy de Connecticut, es evitar los aumentos repentinos de cruces de inmigrantes que abruman a las autoridades federales.

La administración Biden y los líderes del Senado han estado muy involucrados en las conversaciones y se espera que se publiquen más detalles sobre el acuerdo en los próximos días.

Sólo en diciembre, hubo más de 300,000 encuentros con inmigrantes. La fuente dijo a CNN que si la nueva legislación estuviera en vigor, la frontera se cerraría ahora mismo para los inmigrantes indocumentados.

Otra fuente familiarizada con el asunto dijo a CNN que a ciertos inmigrantes se les permitiría quedarse si demuestran que están huyendo de persecución o tortura, y que todavía habría un mínimo de 1,400 solicitudes de asilo que podrían procesarse a través de puertos de entrada legales mientras dure la emergencia.

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