ENID estudiará frontera con una óptica jurídica

Las migraciones, las energías, el medio ambiente, la violencia, los derechos humanos, los intercambios económicos y las remesas son algunos de los ejes de trabajo de la Estación Noroeste de Investigación y Docencia Héctor Felipe Fix Fierro (ENID), que arrancó actividades hace poco más de siete años.

Dirigida por Juan Vega Gómez, la ENID operó en distintas sedes, pero el 16 de junio pasado fueron inauguradas sus propias instalaciones cerca del muro fronterizo entre México y Estados Unidos, en Tijuana, Baja California.

Dice Pedro Salazar Ugarte, director del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM (IIJ), que el establecerse en esa zona fue una decisión estratégicamente adoptada por quienes lideraron el proyecto.

“Buscamos una propiedad que estuviera colindando y mirando al muro fronterizo para que quienes estuvieran trabajando e investigando tengan ante sí la frontera y puedan pensar en ella e interactúen con los problemas que de ahí surgen”, señala.

La ENID también busca dar servicios bibliotecarios, hemerográficos y documental jurídico importantes para la región noroeste del país, y para ello inició con 27 mil 410 libros, 70% provenientes del acervo del constitucionalista e investigador emérito de la UNAM, Héctor Fix-Zamudio, que fueron donados por su hijo, Héctor Felipe Fix Fierro, exdirector del Instituto de Investigaciones Jurídicas del IIJ.

Desde 2015 a la fecha se han matriculado 17 estudiantes en el programa de Doctorado en Derecho, además de que ya ha habido cinco egresados. Actualmente, nueve alumnos están inscritos y tres se encuentran en proceso de examen de grado.

Sin embargo, Salazar Ugarte asegura que en los próximos años esa institución crecerá porque cuenta con el potencial para convertirse en un centro de pensamiento global y en un referente para estudiar los temas que se registran en la frontera desde una perspectiva jurídica.

En su opinión, la consolidación de la ENID era muy importante porque no existía un centro de investigación académica de excelencia, dedicado a estudiar los problemas que se registran en la frontera desde una óptica jurídica.

“Existen centros muy respetables que estudian los temas de frontera desde otras ópticas: económicas, sociológicas y politológicas, entre otras. Pero no había un centro que pusiera el énfasis en mirar la dimensión jurídica de los temas, como la migración, los cambios de energía, el medio ambiente, las violencias y los derechos humanos, por mencionar algunos”, expone.

“Y esa es la gran aportación de la estación, que viene a contribuir, a sumar una perspectiva que no era la perspectiva dominante al estudiar los temas de las fronteras”, añade.

Destaca que la investigación académica en una universidad pública, como es la UNAM, debe tener una incidencia social, por lo que señala que el trabajo que se realice en la ENID no debe quedarse en el terreno intelectual y sólo para la academia, porque debe tener impacto social.

El director del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM asegura que la agenda de la ENID es “muy pujante, ya es muy presente y es muy ambiciosa al decir que la estación debe ser un centro de pensamiento global”, eso significa que debe de estar estrechamente vinculada con instituciones académicas del continente americano, de Estados Unidos, de Europa y de manera también muy potente con la región Asia-Pacífico.

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