El truco perfecto para limpiar las mamparas de la bañera y eliminar las manchas de humedad y moho
Limpiar la casa puede convertirse en una tarea ardua, especialmente cuando nos enfrentamos a zonas propensas a ensuciarse rápidamente. Mantener la higiene sirve para evitar contagiarnos enfermedades provenientes de distintas bacterias y gérmenes.
Uno de los lugares más desafiantes suele ser la mampara de la ducha, cuyo cristal se ve afectado por las manchas causadas por los productos de higiene personal. Además, la constante exposición a la humedad facilita la proliferación de bacterias y moho.
Truco perfecto: ¿cómo limpiar la mampara de la ducha?
La mampara de la ducha es uno de los lugares más complejos de limpiar de una casa debido a que por su uso se ensucia muy fácilmente y tiene que ser limpiada con mucha frecuencia. Además, no es una actividad cómoda para hacer.
Afortunadamente, existe un truco casero que puede ayudarnos a mantenerla limpia por más tiempo. En una botella limpia y vacía vas a tener que agregar:
- 120 mililitros de agua.
- 60 mililitros de jabón de lavavajillas.
- 120 mililitros de vinagre blanco, podés calentarlo para que tenga mayor efectividad.
- Luego vas a tener que mezclar los ingredientes hasta que se logre una mezcla homogénea.
Una vez que tengas la preparación lista, rociá generosamente la mampara del baño y dejala actuar durante unos minutos para que la solución disuelva la suciedad incrustada.
Luego, utilizá una esponja para limpiar la superficie, asegurándote de abarcar todas las áreas afectadas. Finalmente, vas a tener que enjuagar con agua limpia y secar con un paño suave para obtener un acabado impecable.
Este truco casero no solamente te servirá para mantener libre de bacterias y gérmenes tu mampara, sino que también será de gran utilidad para el medioambiente, ya que estarás usando productos naturales.
Consejos para mantener limpia la mampara del baño
Más allá de utilizar este truco, es importante implementar un mantenimiento preventivo para prolongar los efectos de la limpieza y mantener las mamparas de la bañera limpias.
Un aspecto fundamental en este mantenimiento es el secado adecuado de la mampara después de cada uso. La humedad residual puede contribuir significativamente a la formación de manchas y al crecimiento de moho, por lo que un simple gesto como secar la superficie puede marcar la diferencia.
Además, la ventilación adecuada del baño es clave para controlar la humedad. Asegurate de que el baño esté bien ventilado durante y después de la ducha, ya sea abriendo ventanas o utilizando un extractor de aire.
Otro consejo útil es incorporar un limpiador diario en tu rutina de cuidado de la mampara. Una mezcla simple de agua y vinagre en una botella rociadora puede ser tu aliada para prevenir la acumulación de suciedad y manchas entre limpiezas más profundas.
Por último, no descuides la limpieza regular. Programá una limpieza profunda de la mampara al menos una vez por semana utilizando la mezcla de vinagre, jabón y agua. Este paso no solo eliminará la suciedad acumulada, sino que también evitará que se vuelva más difícil de eliminar con el tiempo.