El renovado Renault Captur ya tiene precios para España: así es su nueva gama
El Renault Captur 2024 estrena nuevo frontal, en la línea con los Scenic.
Llega un peso pesado a los concesionarios españoles: el renovado Renault Captur. El todocamino francés -fabricado en nuestro país- estrena imagen y equipamientos, si bien la oferta mecánica se mantiene inalterada.
La nueva gama Captur 2024 estará formada por cuatro opciones mecánicas, con tecnologías diferentes: gasolina convencional, gasolina microhíbridos, GLP e híbridos (a diferencia del anterior no tendrá ni diésel ni híbrido enchufable). Por tanto, con etiquetas desde la C hasta la ECO.
El acceso se hace a través de una variante TCe de 90 caballos de potencia que, en sus versiones bifuel con GLP salta a 100 caballos (esta última es la primera versión ECO). El microhíbrido entrega 140 caballos mientras los híbridos convencionales se van a 145 CV. Estas dos últimas opciones mecánicas son las únicas en las que se puede pedir un acabado deportivo Esprit Alpine como complemento a los habituales techno y Evolution.
Precios desde 21.690 euros
El Renault Captur 2024 más accesible será el TCe 90 CV evolution, que cuesta 21.690 euros (son unos 3.300 euros más que la versión base anterior) pero que viene con un equipamiento más limitado que el resto. Por ejemplo, su cuadro digital es de 7 pulgadas o sus llantas no son de aleación, aunque es cierto que incorpora todos los asistentes a la conducción a los obliga la UE.
A partir del techno ya tenemos climatizador automático (en el evolution es aire acondicionado), modos de conducción Multisense, freno de parking, luces y parabrisas automáticos, acceso y tarjeta manos libres o llantas de 18″.
Los Esprit Alpine, además de un look diferente (donde destacan las llantas de 19″) cuentan con detalles exclusivos como el volante con calefacción, el control de crucero adaptativo o los sensores de parking delantero, trasero y lateral o la iluminación LED interior.
Renault Captur 2024: mejorado y hecho en España
El Renault Captur 2024 es la actualización de la segunda generación del todocamino urbano francés que para nuestro país tiene el aliciente especial de que se fabrica en Valladolid. Es, por tanto, un SUV ‘made in Spain’.
Como buen restyling, sus medidas no cambian (se mantiene en 4,23 metros), pero sí su imagen, con un frontal bastante renovado en la línea con el Scenic, con una parrilla que acoge el logo de Renault en el centro, ópticas LED muy perfiladas y luces diurnas con mucha personalidad, con forma de rombo.
Detrás hay menos cambios, pero el conjunto se verá distinto gracias a los nuevos diseños de las llantas de aleación y a la presencia de nuevos acabados más deportivos: los Esprit Alpine, que ahora llegan también al pequeño SUV urbano. Dentro, como es tendencia, hay más materiales reciclados, se actualizan las tapicerías y desaparecen los cromados.
Aunque ya tenía un cuadro digital, el nuevo (de 10,25 pulgadas) tiene diseños actualizados para el panel de instrumentos. La pantalla principal es ahora de 10,4 pulgadas en todas las versiones y viene con servicios Google integrados.
Por suerte, lo que no se ha perdido es la banqueta trasera deslizante, un detalle muy funcional. Gracias a ella tenemos un maletero flexible (oscila entre 422 y 536 litros como tope, aunque los híbridos completos penalizan un poco por la batería: 326/440).
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