Hennessey H700: El último de los Corvette se rinde al encanto de Texas

Cuando Chevrolet, en 2020, dejó cariacontecidos a los puristas del Corvette con el Stingray C8 de motor trasero central, lo hizo por una buena razón: lograr un mayor (y mejor) equilibrio entre las prestaciones puras y una conducción precisa.

Pero, al igual que muchos políticos estadounidenses, no contaban con la opinión de Texas. En el estado de la estrella solitaria todo debe hacerse a lo grande, y para quienes consideran que la octava generación de este legendario deportivo no tiene suficiente potencia, ahora Hennessey ofrece una solución por las bravas con su H700.

Con 708 CV el límite es el cielo

Como suele ser tradición en Hennessey, el número incluido en la nomenclatura alude a su rendimiento. Nada menos que 708 CV de potencia y 865 Nm de par, un aumento respectivo del 44% en lo primero y del 37% en lo segundo frente a las especificaciones del Corvette Stingray original.

Hennessey H700 Corvette Stingray

Ello se consigue mediante el montaje de un musculoso (así lo dicen ellos) sobrealimentador dirigido por correa y pensado para encajar en el exiguo vano motor sin comprometer ni las prestaciones ni la fiabilidad, ya que junto a él se montan también un intercooler con refrigeración líquida y un nuevo conjunto de catalizadores de escape menos restrictivos. En opción se ofrecen unas llantas ultraligeras en 19 pulgadas y una decoración para la carrocería con vinilos en color de contraste.

Hennessey H700 Corvette Stingray

Rematado por una reprogramación del software de gestión del motor, el Hennessey H700 está listo para triturar, de momento sobre el papel, al Corvette de serie más salvaje que ofrece Chevrolet en su catálogo, el Stingray Z06, que entrega tan sólo 670 CV de potencia. Una opción más que ideal, la del fabricante texano, para terminar de destrozar nuestro peinado volando bajo el cielo abierto. O, visto de otro modo, la herramienta ideal para crear una nueva tendencia en peluquería.