María del Monte no podría salvar a Antonio Tejado si retira la denuncia: a qué condena se podría enfrentar

No está en manos de María del Monte (61 años) cerrar el caso. Tampoco que su sobrino, Antonio Tejado (39 años), abandone la cárcel sevillana en la que permanece desde el pasado 12 de febrero. La artista desearía que fuera una pesadilla y, por ello, se ha llegado a plantear retirar la denuncia por el robo sufrido en su vivienda el pasado verano. Sin embargo, este paso atrás no sería suficiente para que Tejado recuperara su antigua vida. Ni mucho menos. Así se lo asegura a la revista SEMANA una abogada penalista.

Puestos en contacto con Legálitas, nos insisten en la importancia de que Antonio Tejado está en prisión provisional porque un juez le ha considerado “presunto autor intelectual del asalto”. Esto se suma a todas las pruebas recabadas en la ‘Operación Abgena’, siendo muchas de ellas las que relacionan al sevillano con este caso tan oscuro. La primera de ellas las escuchas realizadas por la Guardia Civil en el teléfono de Tejado o su frialdad durante su interrogatorio.

“No está en manos de María del Monte cerrar el caso”, cuenta la abogada de Legálitas 

La abogada especialista en materia penal nos relata el escenario que tendría lugar si María del Monte llegara a retirar la denuncia interpuesta tras el robo en su casa de Gines (Sevilla). “Es un delito público perseguible de oficio. Solo si son injurias y calumnias sería posible cerrar el caso si la otra persona retira la acusación, pero no es el caso. Si aquí hay suficientes pruebas puede seguir el Fiscal ejerciendo la acusación. No está en manos de ella cerrar el caso. El Fiscal puede seguir adelante…Es importante no tener a la víctima en contra”, cuenta en conversación con este medio.

María del Monte, citada a declarar para contar qué vivió durante el robo a su vivienda

María del Monte se enfrenta este viernes 16 de febrero a una de sus situaciones más complicadas hasta la fecha. Debe personarse como acusación particular en el Juzgado de Instrucción número 16 de Sevilla para relatar la pesadilla vivida el pasado 24 de agosto. Contar con pelos y señales qué sucedió mientras dormía junto a su esposa, Inmaculada Casal. Una noche en la que durante ciertos instantes se le cortó la respiración y donde incluso fue amordazada. Recordemos que cinco encapuchados se colaron en su propiedad, noche en la que se le robó un botín de joyas, relojes de lujo y dinero valorado en 650.000 euros, según el auto.

Pero, ¿qué escenarios se plantean para Antonio Tejado si se demuestra que está implicado en el traumático robo de su tía, María del Monte? A pesar de que durante los últimos días se ha revelado que él podría haber facilitado información y dado instrucciones de cómo llevarlo a cabo, lo que no han confirmado fuentes judiciales es el grado de implicación del sobrino de la cantante. Sí, en cambio, que la geocalización de los ladrones y de Tejado les sitúa en el mismo punto del mapa tras el robo.

María del Monte está abatida.

¿Inductor o cómplice? La condena a la que se podría enfrentar Antonio Tejado si fuera culpable

Para conocer la condena que podría pesar sobre Antonio Tejado si finalmente es culpable, hay que hacer establecer dos diferencias: si es inductor o cómplice. Dos formas de participación en un delito que marcarán el destino del colaborador televisivo si el juicio no termina cómo él espera. “Hay que diferenciar entre inductor o cómplice. Habría que saber si los autores del robo tenían esa intención desde un principio y él se limitó a ayudarles a cometer el robo o si nunca se les pasó por la cabeza y él les motivó. Depende de quién tenga la iniciativa”, explica la abogada de Legálitas con la que este medio ha charlado sobre el caso de Tejado.

Una diferencia que es de suma importancia en los ámbitos legales, pues la condena puede variar en gran medida. “Al inductor se le castiga igual que al autor porque esa persona es quien motiva que se haga, tendría la misma pena que el autor principal del robo. En el caso del cómplice existe una voluntad de ese grupo criminal para cometer un delito. Casualmente cuentan con información privilegiada de alguien que les va a auxiliar en algo que previamente querían cometer. En ese caso la pena para el cómplice se le pone la pena inferior en grado”, sostiene.

Sobrevuelan varios delitos sobre Tejado, aunque él insiste en su inocencia. Numerosas informaciones hablan de robo con violencia e intimidación o pertenencia a organización criminal, posibles delitos que preocupan mucho a la familia de Antonio. Incluida a María del Monte, que está deseando pasar página y cerrar este capítulo tan doloroso para ella.

Sin saber todavía si el juez considera a Tejado cómplice o inductor, esta experta legal nos habla de los escenarios, ninguno descartable hasta la fecha. “Por robo con fuerza en casa habitada…al autor principal podría caerle una pena de 2 a 5 años y si es cómplice se le baja un grado de 1 a 2 años menos un día. También se le podría imputar organización criminal. Para eso debe ser una organización estable, que sean más de dos personas y que se repartan funciones para cometer delitos, no hace falta que los hayan cometido”.

Si él fuera el organizador o inductor podría obtener una pena de 3 a 6 años y si es cómplice y solo forma parte de un año y medio a tres años menos un día. Si fuera un integrante sin poder, el inductor sería condenado de 1 a 3 años y si fuera cómplice de 6 meses a un año menos un día”, señala.

Antonio Tejado regaló a su tía un perro cuando se reponía del violento robo a su casa.

El entorno de Antonio Tejado está desbordado. Confía en que todo se aclare y que nada de lo que se ha dicho sea cierto. Por ello, están centrando todos sus esfuerzos en demostrar su inocencia, un movimiento que también ha llevado desde la cárcel el propio acusado. Tras mandar un comunicado en el que asegura que se están diciendo “muchas falsedades”, nos preguntamos cuánto tiempo podría estar el sobrino de María del Monte entre rejas.

“La prisión preventiva la puede acordar un juez por dos motivos. Porque haya riesgo de fuga o porque haya riesgo de destruir pruebas. Si es por esto último el plazo máximo que puede estar privado de libertad son seis meses. Si es por riesgo de fuga depende del delito cometido. Si es un delito que se castigue con penas iguales o inferiores a tres años el tiempo máximo de prisión preventiva sería de un año máximo. Entonces saldría de prisión y esperaría al juicio”, finaliza.