Amen Candles, la poderosa firma creada por un latinoamericano que reúne arte, sustentabilidad y diseño
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Las velas de Amen Candles son uno de esos singulares hallazgos en el mundo del diseño para el hogar. Cada pieza de la casa aporta algo más que un aroma: son creadas artesanalmente, tienen una sola nota aromática y sus empaques de raíces de hongos son un desafío al uso de plásticos. “Amen no es sobre el qué sino sobre el cómo”, dice su fundador Rodrigo García Álvarez a Architectural Digest México y Latinoamérica. “Es un (proceso) continuo en la forma de pensar sustentable, de querer cambiar paradigmas a través del diseño y el arte”, agrega el uruguayo.
Amen Candles fue creada por el uruguayo Rodrigo García Álvarez, quien concibió las velas como objetos detonadores de la reflexión.
Surgida en plena pandemia, la firma que ha desarrollado colecciones con los descendientes de Pablo Picasso ya se ha posicionado en el panorama gracias a sus procesos de creación única. Sus colecciones son de edición limitada y cada vela se produce artesanalmente en Francia con cerámicas de aquel país y cera vegetal hecha a base de soya. Pese a que son hechas en Grasse, epicentro mundial de la perfumería, las fragancias de cada vela se hacen a base de una sola nota. Los empaques parecen ser delicados cilindros de cartón, pero en realidad son producidos a partir de hongos en un proceso que toma una semana por cada uno.
Para el creativo, se trata de objetos que no solo pueden elevar las atmósferas a través de los aromas sino que son detonadores de conexión y reflexión personal. La primera colección de siete velas inspiradas en los chakras, explica su creador, era una invitación a la meditación mientras que la colección creada con Diana Widmaier-Ruiz-Picasso se pensó para vivir el arte. Las esculturas de luz que también diseñan se han pensado para “hacer un templo en tu casa”. “Tenemos una visión más conceptual y no de la limitación”, comparte García Álvarez desde la segunda edición de Casa AD, el área dedicada a objetos de diseño dentro de Espacio Vogue.
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Una mancuerna con la luz de la dinastía Picasso
Luego de debutar con una colección inspirada en los chakras, Amen Candles se consolidó con una colaboración con la nieta de Pablo Picasso, Diana Widmaier-Ruiz-Picasso. La mancuerna que incluye cuatro velas con algunos de los dibujos del artista español surgió cuando la descendiente del pintor visitó la instalación con la que la firma lanzó su primera colección y se interesó en obsequiar algunas a amigos y colaboradores. “Fue orgánicamente explosiva”, señala el uruguayo sobre el resultado.
Las velas de dicha colaboración incluyen obras como El Acróbata o Guitare à la main blanche acompañadas de aromas como jazmín o gengibre. La mancuerna llevó al fundador de Amen a trabajar de forma cercana a la Fundación Picasso mientras que su nieta se sumergió en cartas y dibujos de su abuelo. “Agregamos una dimensión nueva al añadir aromas a la obra de Picasso”.
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El propio Rodrigo García Álvarez ya ha comprobado que las velas Amen Candles son algo más. Comparte que al mostrarle un par de piezas de la colección Picasso a la artista Manuel Solano, quien perdió la vista por una infección, tuvo una reacción contundente con el efecto de los aromas. “Describió que la de jazmín se sentía como un objeto y que la de amber, un desnudo, le remitía a una persona”, rememora. “Ese fue el momento más lindo de la colaboración”.
Con tal antecedente, ahora el creador de velas Amen Candles se dispone explorar aún más los efectos del diseño como fuerza revolucionaria con el próximo lanzamiento de una nueva categoría de producto cuyo lanzamiento prepara desde Kyoto, Japón, país donde pasa mucho tiempo. “Es totalmente diferente a lo que venimos haciendo, es un nuevo universo”.
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