La investigación científica que reveló cuál es el animal que es tan inteligente y cariñoso como un perro

Cuando pensamos en animales inteligentes y cariñosos, seguramente nos vienen a la cabeza los perros, esos fieles amigos que nos acompañan en el día a día. Pero, ¿y si dijéramos que la ciencia descubrió uno que podría competirle en intelecto y cariño?

Un grupo de investigadores han puesto el foco en un ser que, sorprendentemente, comparte muchas de las cualidades emocionales y cognitivas que tanto valoramos en los perros, la mascota doméstica más famosa del mundo.

Hay otros seres en el reino animal listos para sorprendernos con su capacidad de vinculación y su inteligencia emocional, que poco a poco gracias a investigadores y expertos en salud animal, salen a la luz.

El animal que es tan inteligente como el perro: la ciencia dio a conocer la sorprendente capacidad cognitiva de las cabras

Lejos de ser los simples animales de granja que muchos creen, las cabras han demostrado tener una inteligencia y una habilidad para resolver problemas que nos obligan a verlas con nuevos ojos.

Investigaciones publicadas en prestigiosas revistas como Animal Cognition y Biology Letters han puesto de manifiesto que estos animales, famosos en el campo, pueden aprender tareas complejas y aplicar ese conocimiento de manera innovadora, mostrando un nivel de pensamiento lógico que sorprende.

Por ejemplo, en el Santuario para Cabras Buttercups, en Gran Bretaña, se observó que las cabras buscaban la ayuda de los humanos cuando enfrentaban problemas que no podían solucionar solas, de forma muy similar a como lo hacen los perros.

“Las cabras miran a los humanos del mismo modo que lo hacen los perros cuando piden un premio que está fuera de su alcance”, comentó Christian Nawroth, uno de los autores de la investigación realizada por la Universidad Queen Mary de Londres.

Por otro lado, también confesó: “Nuestros resultados proporcionan pruebas sólidas de una comunicación compleja dirigida a los humanos en una especie que fue domesticada principalmente para la producción agrícola, y muestran similitudes con animales criados para convertirse en mascotas o animales de trabajo, como perros y caballos.”.

Este comportamiento sugiere una forma de comunicación y una inteligencia emocional que antes se atribuían exclusivamente a animales domésticos como perros y gatos.

Cariño en el reino animal: las cabras y sus lazos afectivos, según la ciencia

Si pensabas que sólo los perros podían establecer vínculos profundos con los seres humanos, prepárate para incluir a las cabras en esa lista. Diversos estudios han mostrado que estas pueden desarrollar fuertes lazos afectivos con sus cuidadores, distinguiendo entre tonos de voz y expresiones faciales que indican distintas emociones.

Esta capacidad de vinculación emocional revela un lado de las cabras que muchos desconocíamos.

La empatía entre cabras también es digna de mención, ya que son capaces de reconocer y reaccionar ante las emociones de sus congéneres, ofreciendo consuelo en momentos de estrés.

Este nivel de sensibilidad emocional y social sugiere que las cabras poseen una complejidad emocional y social mucho más rica de lo que tradicionalmente se ha pensado.

Más que simples animales de granja: el potencial de las cabras como compañeros afectuosos e intelectuales

Las investigaciones sobre la inteligencia y la capacidad emocional de las cabras están redefiniendo nuestra percepción de estos animales, tradicionalmente vistos sólo en el contexto de la producción agrícola.

La evidencia acumulada sugiere que las cabras poseen un potencial sorprendente para ser compañeros cariñosos y leales, similares a los perros, con los cuales comparten notables similitudes en términos de comunicación y afecto hacia los humanos.

• Las cabras demuestran una inteligencia emocional comparable a la de perros y caballos, capaces de establecer comunicación compleja con los humanos.
• Pueden recordar la ubicación de objetos durante períodos prolongados, evidenciando una capacidad de memoria a largo plazo.
• Las cabras forman fuertes lazos afectivos con los humanos, respondiendo positivamente a las emociones y preferencias expresadas por sus cuidadores.
• Exhiben empatía hacia sus congéneres, mostrando comportamientos de consuelo y apoyo en situaciones de estrés.

Esta evaluación de las capacidades de las cabras invita a considerar la posibilidad de integrarlas en nuestras vidas no solo como animales de granja sino como compañeros afectuosos.